Las diversas restricciones de circulación y la caída general de la actividad, provocaron un fuerte impacto en la rentabilidad de las Estaciones de Servicio. Según fuentes del sector, casi el 60 por ciento de los establecimientos está en riesgo de subsistencia.

Para atravesar este difícil momento, la Confederación de Entidades del Comercio de los Hidrocarburos está gestionando diferentes ayudas ante organismos del Estado, como ser el ingreso a programas de subsidios destinados al pago de salarios, postergación de vencimientos impositivos  y facilidades de pago.

El pedido también se hizo extensivo a las compañías petroleras. A YPF, por caso, los empresarios le solicitaron una mejora en el margen de retribución destinado al expendedor para absorber una parte del fuerte impacto negativo por el derrumbe de las ventas de combustibles y los servicios adicionales.

La compañía no dudo en atender el reclamo de los estacioneros: Comprometió un incremento porcentual en las comisiones para los negocios que comercializaron un volumen por debajo de los 400 mil litros en mayo.

“Es una buena medida ya que alcanza a más de la mitad de la red”, expresó al respecto el titular de CECHA, Gabriel Bornoroni. “Estamos transitando un presente crítico de pocas ventas, sumado a que debemos afrontar aumentos salariales, todo ello en un  contexto de precios fijos”, señaló.

Ya el año pasado y ante un escenario de similares características, la empresa auxilió a las Estaciones de Servicio de la red. La ayuda se plasmó en un incremento de las comisiones conforme los litros distribuidos, que alcanzó al 30 por ciento de la cadena que está compuesta por más de 1.600 bocas de expendio distribuidas por todo el país.