Reclaman apoyo para su desarrollo
Como sucediera en los demás programas de estímulo a la producción implementados por el gobierno nacional, los estacioneros de GNC descartaron posibles beneficios para la actividad.
El Plan Gas IV y V que presentaron el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Sergio Massa y que suma dos nuevas rondas licitatorias del programa de estímulo Gas.Ar 2020-2024, parecería no implicar consecuencias para el sector expendedor.
Así lo consideró el presidente de la Cámara de Expendedores de GNC Pedro González, quien en diálogo con surtidores.com.ar destacó que el único punto que les puede llegar afectar negativamente es en el hipotético caso que se defina en un futuro un precio de referencia más alto del valor del millón de BTU.
“En ese caso deberíamos renegociar contratos de aprovisionamiento más caros y se vería reflejado luego en un incremento de costos para el empresario y un aumento de precios en el surtidor para el cliente”, explicó.
Además objetó las estrategias del Estado para incrementar la producción de gas en base a nuevos subsidios y dijo: “ninguno de los usuarios de gas domiciliario e industrial paga el producto lo que realmente vale”.
Es en ese punto en el que estableció la diferencia con el negocio del GNC y recalcó que “los consumidores nuestros pagan el precio prácticamente sin subsidios, es decir a valor real”.
González aseveró asimismo, que este plan no tiene en cuenta a las Estaciones de Servicio de GNC porque los contratos de esta actividad se realizan en forma privada con los productores mediante comercializadoras.
Vale recordar que esta nueva iniciativa gubernamental tampoco considera al sector del GNC como “prioritario” al momento de aplicar acciones de beneficios o incentivos especiales, debido en gran parte a que la demanda de este combustible constituye apenas el 7 por ciento del total del gas en todas sus formas.
Por ello, González llamó a las autoridades a crear mayores condiciones que favorezcan el desarrollo de las conversiones de vehículos a GNC, como el combustible de transición hacia las energías limpias, económico y de mayor potencial local.
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Los estacioneros son los mayores enemigos del GNC, asi como los q desincentivan las conversiones, y fomentan las desinstalaciones.
El Estado deberia fijar el precio de venta al usuario de gnc, y asi terminar con los criminales abusos que se generan en algunas provincias