A la competencia desleal que las Estaciones de Servicio rurales vienen denunciando por la sobreabundancia de gasoil mayorista directo en los campos del centro del país, la crisis sumó el factor climático que repercutió directamente en la actividad del despacho  de combustible a camiones, autos y maquinaria agrícola que mermó su capacidad de trabajo.

Los últimos informes reflejan que hay más de 13.000.000 de hectáreas sembradas con soja, maíz y girasol que mantienen una condición de humedad entre regular y mala, ubicadas en La Pampa, Santa Fe, el sudeste de Córdoba y el norte de la provincia de Buenos Aires, donde se está necesitando una importante cantidad de milímetros de agua que no cae.

Este fenómeno se nota a diario según el dirigente de Confederaciones Rurales Argentinas, Matías Lestani quien confirmó con datos certeros el panorama que surtidores.com,ar, aventuraba la semana pasada en una nota sobre la coyuntura del mercado en tiempo de sequía, en diálogo con el Encargado de las Estaciones de Servicio Petrogás, Javier Lapacó.

En este caso, las cuatro bocas de expendio, que basan su negocio principal en la venta de gasoil al agro, dijeron enfrentan un año difícil a nivel estacional, dado que los productores agropecuarios pasaron de una lluvia que inundó las siembras a la actualidad, donde la sequía extrema arruinó los rindes.

“Como expendedores de la zona, tratamos de alargarle los plazos de pago a los clientes que por causa del mal clima se vieron perjudicados en su producción”, había expresado el estacionero Lapacó.

Este hecho lo transmitió desde otro punto de vista el representante de CRA quien comentó que esta situación está generando un perjuicio en las economías de pueblos y ciudades del interior: “La venta de insumos y semillas ha caído debido a la complejidad que se nota en el andar diario en las Estaciones de Servicio que bajaron su tránsito y en el humor de la gente”.

Recordó que la falta de precipitaciones profundizó un tema que complica la operatoria de las expendedoras, debido a que los productores prácticamente ya no tienen facilidades de financiamiento, ya que no puede pagar el gasoil con cheques diferidos,  porque el estacionero necesita hacerse de los valores en el mismo momento  que despacha el producto, afectado por los aumentos constantes.