Reclamos a las autoridades
Elevaron notas al secretario de Comercio Interior y al asesor energético de la presidencia de la Nación, con la intención de que la compañía las contemple en un “plan de embanderamiento masivo”.
Tras lo que consideraron “postergación de las respuestas a los planteos efectuados hace ya casi un mes, desde que se agravó el achicamiento de la brecha entre el precio de los combustibles a nivel mayorista y la imposibilidad de actualizar los importes al público”, un total de 50 estacioneros de pequeño nivel de expendio y en su mayoría sin bandera, insistieron con su reclamo ante las autoridades.
Vale destacar que el grupo referido de empresarios del sector ya se había reunido días atrás con el subsecretario de Hidrocarburos y asesor presidencial, Ariel Kogan, con quien habían acordado entre otros temas, “llevar los márgenes brutos a valores sensatos que nos permitan sostener la red comercial, basados en ventas promedios reales”.
De la misma forma, exigieron “avanzar en la regulación estatal de los contratos que definen la relación entre empresas petroleras y Estaciones de Servicio para evitar situaciones abusivas”.
En el mismo orden de temas, la carta que le dirigieron al secretario de Comercio Roberto Feletti, tiene un tenor similar pero denuncia “desabastecimiento de las estaciones blancas, acciones distorsivas de las refinadoras e inestabilidad de los márgenes de rentabilidad”.
Ambos funcionarios fueron anoticiados por los autores del reclamo, que “el rubro lleva más de 21 meses de situación límite de quebranto, enmarcados en la pandemia y la crisis económica, hechos que fueron valorados recientemente por diputados y senadores nacionales quienes elevaron un proyecto de ley para declarar a las Estaciones de Servicio de combustibles líquidos y de GNC en emergencia nacional”.
Los firmantes revelaron a este medio que además tienen planeado insistir ante la Secretaría de Energía para que la petrolera de bandera YPF con participación estatal mayoritaria sea utilizada para salir al auxilio del sector y armar un plan de embanderamiento masivo.
“De esta manera se podrá rescatar de la crisis a las estaciones más pequeñas que hoy cumplen una tarea social en muchas regiones de la Argentina a pesar de no ser consideradas rentables para las compañías”, explicaron.
Mientras que en diferentes lugares del país denuncian la imposición de cupos de entrega, el valor de la nafta y el gasoil no para de subir en el canal mayorista, lo que dejó sin margen de ganancia a las expendedoras sin contrato.
Son 553 expendedoras que no alcanzan el piso de equilibrio necesario para cubrir sus costos. Reclamaron asistencia a la AFIP para atravesar una crisis, que consideran sin precedentes.
Reclaman un canal de abastecimiento exclusivo para los establecimientos de menor envergadura que brindan servicio de combustibles a nivel social. Buscan además terminar con la proliferación de puestos clandestinos de venta de naftas y gasoil.
