Se publicó en el Boletín Oficial la Resolución 456/2022 por la cual el Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS) aprobó el reglamento con las pautas y requisitos para la ampliación de Estaciones de Servicio GNC destinadas a abastecer a camiones y colectivos.

La norma en cuestión establece las características con las que deben contar las instalaciones para realizar el abastecimiento, como por ejemplo radios de giro, carriles de carga, vías de circulación, entre otras, con tal de que las bocas de expendio operen de forma segura el despacho a vehículos carreteros destinados al servicio de transporte de pasajeros o de carga.

Pedro González, presidente de la Cámara de Expendedores de GNC (CEGNC), conversó con surtidores.com.ar y consideró positiva la iniciativa ya que permite ordenar el mercado y que quien esté interesado, pueda pedir la habilitación de una isla de alto caudal.

“Están las condiciones dadas para adoptar esta alternativa en cada Estación de Servicio, principalmente en las de ruta porque normalmente ese tipo de transporte pesado no circula por la ciudad y por su ubicación y predios más grandes, éstas tienen más posibilidades de cambiar algún surtidor. Si no habrá estaciones que deberán hacer modificaciones para generar la posibilidad de maniobra y la entrada y salida de vehículos pesados”, sostuvo.

“Lo más oportuno, para una expendedora que ya esté operativa, es incorporar un surtidor doble de gas natural comprimido porque no se sabe qué caudal de camiones aparecerán. Pero en la medida que haya más transporte con GNC y sea mayor la demanda, inmediatamente se podría poner otro surtidor”, agregó González.

¿Por qué se recomienda cambiar en lugar de agregar surtidores? El especialista explicó que añadir nuevas islas y nuevas bocas implica otro tipo de autorizaciones y reglamentaciones, sumado a que las distribuidoras deberían permitirlo y, bajo su mirada, “algunas pueden ser más estrictas que otras”.

Pero sea cual sea la decisión que se tome, las Estaciones de Servicio contarán con el beneficio económico de poder abastecer a una nueva demanda del transporte pesado a gas natural comprimido. Y en la medida que haya más vehículos de esta índole en circulación, el retorno de la inversión se reducirá.