Las Estaciones de Servicio que no tienen contrato de exclusividad con las petroleras son las que más sufren la inestabilidad del precio de los combustibles y la crisis de abastecimiento. Aunque su situación mejoró comparado a meses atrás, la época de cosecha aumenta la demanda y vuelve a sentirse la presión de la cuotificación.

En diálogo con surtidores.com.ar, Alberto Boz, presidente de la Federación Argentina de Expendedores de Nafta del Interior (FAENI), aseguró que los estacioneros se abastecen de “gasoil blue”. El precio al que estos empresarios blancos lo consiguen es de entre $180 y $190. Resalta que los más afectados son aquellos que se encuentran sobre los corredores de los campos al puerto.

Asimismo, afirma que en muchos casos los volúmenes de venta se recuperaron a los valores pre pandemia. Pero la realidad se irá agravando en el interior de cada provincia ya que las Estaciones de Servicio de rutas por las que circulan los transportistas de granos no llegarán a cubrir la demanda, teniendo en cuenta el cupo con el que están trabajando.

Por su parte, retoma el reclamo al gobierno nacional de sentarse con las petroleras para ampliar el margen de utilidad de los operadores. “El desfasaje del precio del gasoil interno en comparación con el extranjero sin que el Estado compense, hace que las proveedoras no quieran importar más combustibles y exista cada vez un mayor desabastecimiento”.

Para poder recuperar el punto de equilibrio de las Estaciones de Servicio, Boz dice que hay que acudir al ingenio para cubrir la falta de ingresos de combustible y le adjudica a las tiendas de conveniencia un rol fundamental a la hora de cumplir este objetivo.

“Hay que redoblar esfuerzos e inteligencia para doblar ingresos y sostener esta situación. Los shops ayudan a reducir la brecha de los costos que implican sostener toda la estación”, sostuvo el presidente de FAENI.