En un contexto de imposibilidad de actualizar los precios, a la vez que los costos aumentan, el mercado de la venta de combustibles recurre hoy con mayor frecuencia y creatividad a las promociones brindando así un valor agregado para recuperar o captar nuevos clientes.

Hoy todas las empresas ofrecen importantes descuentos por cargar nafta o gasoil en sus Estaciones de Servicio, además de premios asociados a la compra. ¿Cómo es posible cuando los surtidores no sufren variaciones desde mayo y la rentabilidad está cada vez más comprometida?

Al respecto, el ex secretario de energía Emilio Apud, explicó a surtidores.com.ar que las petroleras no hacen promociones para ganar más dinero, sino que agudizan el ingenio para mantener su porción en el mercado, a la espera de un mejor momento.

Agregó que con las actuales condiciones en las cuales la demanda tiene un techo, el objetivo de estas iniciativas comerciales es el de mantener o “robarle clientes a la competencia”, en un círculo vicioso de bajo consumo.

Apud hizo hincapié en que mientras la venta de combustible pierde rentabilidad, se profundizan las inversiones en los negocios adicionales como las tiendas de conveniencia, las cuales contribuyen a tomar clientes y mejorar las promociones.

“Ningún negocio es sustentable cuando no da ganancia”, afirmó en referencia a que “la torta que no se agranda”, lo que llevó a las Estaciones de Servicio a quedar en un punto de equilibrio inestable. “Es una situación que ofrece un futuro incierto”, dijo Apud.

En ese mismo camino, el presidente del Instituto Argentino de la Energía “General Mosconi”, Jorge Lapeña, opinó que las promociones no tienen por objeto “regalar plata”, sino todo lo contrario ya que a su entender apuntan a “fidelizar clientela, aumentar volumen de ventas y mejorar la imagen corporativa”.