Pese a que en Argentina el Estado aún no regula la comercialización de energía para la electromovilidad, los estacioneros instalan cargadores eléctricos como beneficios exclusivos con la intención de atraer a nuevos clientes.

Las inversiones en cargadores básicos, de 22 kW de carga lenta, tienen un costo entre 7.500 y 8.000 dólares, incluyendo insumos e instalación. Mientras que los rápidos cotizan entre 14.000 y 15.000 dólares o más, dependiendo de la calidad de los equipos.

“La actividad está más enfocada en cotizaciones y relevamientos que en ejecuciones reales”, indica Diego Martín, titular de la firma NCM Servicios y aclara que la mayoría de los operadores interesados pertenecen a la red de las grandes marcas ya que el costo es muy alto y los empresarios más chicos no lo consideran viable.

En diálogo con surtidores.com.ar el ejecutivo explica que además de la compra de los cargadores, se debe tener en cuenta los insumos necesarios para la instalación y la preparación del espacio que cumpla con los requisitos que describe la normativa.

¿Cuáles son? Cables aptos para la tensión eléctrica indicada, sistema de parada de emergencia correspondiente para garantizar la seguridad, distancias reglamentarias de los cargadores con los surtidores y tanques, además de la correcta señalización del sector.

En tanto los cargadores eléctricos sean más grandes y complejos, la instalación también lo será. Asimismo, estos requieren que la estación cuente con un certificado de tensión constatada para poder abastecer una columna de mucha potencia.

Estos pueden ser de 60 kW, 100 kW o más y pueden hasta triplicar el costo de inversión.

IMPULSORA DEL CAMBIO

Martín comenta que YPF ocupa el primer lugar con su estrategia de incorporar equipos de carga rápida en todas sus estaciones nuevas.

En este sentido, los instaladores argentinos consideran que el 2023 será un año de grandes pasos para el segmento, aunque menos acelerado que la incorporación de paneles solares que sí están más avanzados en la regulación.

Ambas tecnologías se han convertido en un gran atractivo para el rubro, apostando a un futuro en donde la transición energética esté más avanzada.

Es por ello que desde NCM Servicios eligieron la marca de Chargebox, líder en Argentina, para la instalación de la mejor calidad y con variedad de alternativas en equipos que se ajustan a las necesidades y posibilidades de cada cliente.

“Tenemos las energías concentradas en estas nuevas tecnologías para que las estaciones cumplan con sus metas y proyectos“, confirmó Martín y explicó que la compañía acompaña a los expendedores en todo momento, ayudándolos a realizar las evaluaciones, estudios y tramitaciones previas, a modo de hacer un trabajo en el marco de las normativas locales y nacionales.