El GNC está iniciando un período de fuerte desarrollo en nuestro país. Próxima a entrar en vigencia, la normativa NAG-420 que detalla los requisitos de habilitación para el abastecimiento del transporte pesado, permitirá a las Estaciones de Servicio que cumplan con este marco regulatorio brindar su servicio a camiones y transportes de pasajeros, dando un verdadero impulso al mercado.

En este contexto, la Cámara Argentina del Gas Natural Comprimido (CAGNC) volvió a elegir sus autoridades otorgando la continuidad de la presidencia a Carlos Grisolia que seguirá contando con Gustavo Salustri como vicepresidente.

Es así que Grisolía habló con surtidores.com.ar, describió cuáles serán los ejes de la gestión durante este período y comentó sobre la situación actual de los estacioneros. En principio, resaltó el horizonte positivo que muestra este 2022 con la nueva normativa vigente.

“Era una deuda y un anhelo muy grande que teníamos dado el gran potencial de nuestro país con el GNC. Es una oportunidad enorme para el desarrollo de todos los integrantes del sector y le permitirá a la economía nacional un fuerte ahorro de divisas“, afirmó el empresario.

En este sentido, explicó que este seguirá siendo uno de los pilares de trabajo debido a que aún queda mucho por hacer en cuanto a la difusión del alcance de dicha norma. “Vamos a reunirnos con otras cámaras y empresas para actuar en todos los ámbitos buscando alternativas de apoyo a este proceso de conversión de las flotas, siempre tratando de simplificar la instalación y el expendio de GNC”, sostuvo.

Asimismo, el dirigente observó que, en cuanto al transporte liviano, las conversiones se encuentran en una etapa de estabilidad que espera que crezca con la normalización del precio de las naftas. Además, considera necesario intensificar la difusión de la conveniencia del uso de GNC como combustible por ser mucho más económico y amigable con el ambiente, lejos de mitos erróneos que aún pesan a la hora de que las personas elijan usar gas para sus vehículos.

“También será nuestro objetivo bregar por la revisión de algunas normativas relacionadas a los controles que deben realizarse en las instalaciones de los equipos: acentuando aquellos que permitan minimizar los daños, evitando sumar burocracia, y ajustando otros que, conforme aparecen nuevas tecnologías, pierden sentido y resultan costosos”, expresó Grisolía.

Desde su punto de vista, el nuevo panorama que se presenta para el GNC será una solución tanto para los estacioneros que ya cuenten con el servicio como para aquellos que puedan sumarlo a su oferta. “Siempre les fue mejor a quienes tienen las dos opciones de combustibles. Además, el gas natural comprimido es el ideal para la transición hacia las nuevas alternativas más sustentables”, concluyó.