Ante la imposibilidad de retocar los precios al surtidor, la alternativa de actualización más concreta para las compañías productoras y refinadoras, pasa por el mercado mayorista.

Es allí donde los referentes que se dedican a esta actividad, comentaron a surtidores.com.ar, que “los ajustes, especialmente en el gasoil directo al agro, son constantes y siempre hay fluctuaciones”.

Esa conclusión la expresó el presidente de Petroenergía, Mauro Lapacó quien informó que los proveedores evalúan aumentar un 5 o 6 por ciento, para recuperar los márgenes que impone el nuevo tipo de cambio y la suba de la inflación.

Agregó que, si bien la semana pasada subió muy poco el precio de los combustibles mayoristas en algunas compañías, se espera que el segmento del diesel al agro eleve su valor en las próximas entregas.

En este contexto, Lapacó advirtió que “de seguir como hasta ahora la estructura de costos, el mayorista va a subir bastante y la brecha con las Estaciones de Servicio se achicará, para que se repita lo que ya pasó muchas veces, donde el cliente del gasoil directo terminará pagando más caro que en un surtidor minorista”.

Otras fuentes consultadas destacaron que este fenómeno pronosticado por el empresario de La Pampa, puede causar una mejora temporaria en algunos establecimientos relacionados con los sectores agropecuarios, que recuperarán cierta cantidad de consumidores de gran porte.

Pero los más pesimistas, vaticinan que, si se profundiza esta coyuntura en la cual el mayorista es más caro que el minorista, el riesgo de quiebres de stocks en las Estaciones de Servicio rurales sería inevitable.

Ante este panorama, los expendedores que se proveen de este canal reiteraron su reclamo – expresado varias veces a través de este medio- para que se efectivicen las acciones con el objeto de que las petroleras y el gobierno implementen políticas sustentables que le brinden tanto a los mayoristas como a las estaciones blancas reglas claras para desarrollar la actividad.