El representante de los trabajadores petroleros de la Provincia de Córdoba, Guillermo Borrelli aseguró a surtidores.com.ar, que la actitud de las autoridades nacionales “los tiene desconcertados”, ya que “supone” que la decisión de no abrir nuevas paritarias, como vienen anunciando los funcionarios de gobierno, “corresponde a quienes cerraron convenios anuales”.

En ese sentido, Borrelli advirtió “nuestro acuerdo paritario era por seis meses y el compromiso fue sentarnos a negociar en octubre hasta marzo de 2017, luego de evaluar la situación económica de los compañeros trabajadores”.

Agregó que “los que cerraron por un año un aumento del 35 por ciento, perdieron poder adquisitivo, ya que el mismo INDEC calcula para este año un promedio de inflación del 45”, por ende, deslizó que el sindicato no se bajará de un reclamo por un mínimo piso de un 20 por ciento más hasta marzo del año que viene, debido a que el primer semestre se homologó un incremento del 25.

Advirtió Borrelli que el aumento de precios sigue pegándole a la familia de los afiliados y la crisis de las Estaciones de Servicio se agravó luego de los tarifazos y los cambios de política que repercutieron entre otras cosas, en las expendedoras de GNC.

Expresó además el gremialista que “todavía no hablamos al respecto con la Cámara empresaria” y por otro lado informó que “la crisis del GNC persiste, aunque de ahí que en alerta ante cualquier puesto de trabajo que esté en peligro”.

Reiteró que el gremio no se “bajará” de las reivindicaciones adquiridas aunque se mostró preocupado por la falta de rentabilidad. No obstante informó que de una u otra manera “las reaperturas de paritarias se hará en octubre”.

Finalmente descartó que la organización se encuentre en “estado de alerta” pero sin embargo sigue atento a la marcha de los precios para realizar el pedido formal de encuentro entre los empresarios y el Ministerio de Trabajo por la nueva escala salarial.