Desde hace ya muchos años cada vez más clientes buscan en internet los productos que desean, observan reseñas y opiniones ajenas para luego tomar decisiones informadas antes de realizar sus compras online. Desde hace un tiempo también, esta tendencia se ha trasladado a las tiendas de cercanía, imponiendo una nueva forma de pensar cómo “posicionar” los negocios, entre ellos las Estaciones de Servicio, en internet.

Cada vez más personas buscan en internet, a través de sus teléfonos y asistentes digitales, los mejores locales y servicios más cercanos cuando los necesitan. En este sentido, cobra vital importancia saber si las Estaciones de Servicio “aparecen”, cómo aparecen en esa búsqueda y qué servicios ofrecen cuando los usuarios las encuentran.

El momento en que un usuario busca “Estación de Servicio más cercana”, es cuando entra en juego el algoritmo de Google, intentando recomendarle al usuario no sólo la que esté más cerca, sino la que considere es la mejor opción para ese usuario.

Este posicionamiento en motores de búsqueda como Google Maps, cobra cada vez más importancia a la hora de redirigir el público hacia tu negocio. Lo cierto es que, si bien nadie conoce el algoritmo de Google, se han delimitado algunas buenas prácticas para que los usuarios encuentren las estaciones y cada servicio que ofrecen cuando lo necesiten.

Lo más básico y fundamental es que cada empresa debería ser propietaria de su punto de Google My Business, el motor de búsqueda por excelencia para negocios y servicios locales. Esto no siempre sucede, ya que algunos puntos son generados por clientes o colaboradores y por ende se debe solicitar la propiedad de este a Google. Además, toda la información de los puntos debería estar actualizada incluyendo horarios, servicios, dirección y teléfono, entre otros.

A pesar de que cada empresa debería tener en el radar su posicionamiento local online, ningún esfuerzo que se haga en el formato digital debería quitarle lugar a la experiencia del cliente. Esta experiencia, casi siempre se verá reflejada en el puntaje de Google (de 1 a 5 estrellas).

La nueva batalla por los clientes se libra en el plano virtual, pero se gana en cada punto de venta y en cada interacción. En este sentido, los esfuerzos son complementarios. Las empresas deberán contarles a sus clientes que hacen y que ofrecen en el plano digital, pero asegurarse de ofrecerlo de la mejor manera y con la mejor calidad una vez que el cliente esté allí.