La coyuntura energética producto de los recientes cambios impulsados desde el Gobierno de Javier Milei, modificaron la estructura de consumo en el mercado de los combustibles.

Al respecto, desde la consultora “Economía y Energía”, que lidera el especialista Nicolás Arceo, se afirma que a lo largo de los dos últimos meses, los incrementos de los precios de los combustibles en surtidor por debajo de la variación del IPC, determinaron un abaratamiento de los mismos del 12 por ciento, en términos reales respecto a los valores que habían alcanzado en el mes de enero del corriente año.

En este sentido, sostiene que la retracción en los niveles de demanda no obedece a una circunstancia de precios excepcionalmente altos, sino a la disminución persistente en el ingreso real de los hogares durante los últimos años.

Al respecto, Arceo señala que “la posibilidad de alcanzar un precio de paridad de exportación para el crudo comercializado en el mercado local, se alejó en los dos últimos meses como consecuencia del abaratamiento de los combustibles en el mercado local y del aumento del crudo en el mercado internacional”.

En otro orden, quien fuera vicepresidente de YPF entre 2012 y 2015, precisó que la crisis de abastecimiento del gasoil durante 2022 condujo a una modificación inédita en el escenario local: las naftas tuvieron un precio inferior al del diesel ante el incremento del valor de este último. Sin embargo, destaca Arceo, desde mediados de 2022, el diferencial entre ambos comenzó a reducirse.

Por otro lado, enfatizó que la disminución del consumo de combustibles en los últimos meses, ante el aumento en el precio, condujo a una reducción en la brecha entre los productos grado dos y tres.

El economista finalmente, detalló que con los recientes incrementos, el valor de los combustibles en Argentina al dólar oficial se sitúa en torno a la mediana regional. “Se observa una menor dispersión”, subrayó.