Este año, los empleados de bocas de expendio ya anticiparon que el mínimo para empezar a negociar sueldos es del 30 por ciento. Los precios de los combustibles, si bien subieron 6 por ciento durante enero y se espera otro retoque para abril, con el barril de crudo planchado en 30 dólares en las plazas internacionales difícilmente escalen en esa proporción.

Además, es sabido que no está en la naturaleza de Juan José Aranguren, el Ministro de Energía y Minería, aplicar subsidios a las actividades que no son rentables. Por el momento, el funcionario mantiene el barril en 67 dólares tranqueras adentro, para evitar el conflicto social y despidos en el sur. Pero en el mediano y largo plazo, quiere nivelar los valores con el resto del mundo.

En este escenario, las estaciones se preguntan de dónde obtendrán fondos para destinar a los ajustes salariales. Antonio Gianello, presidente de la Cámara de Expendedores de San Luis (CECASL) advierte que “cada vez se necesita vender más combustible para pagar sueldos pero las ventas no crecen”.

Actualmente, de acuerdo a los empresarios del rubro, el punto de equilibrio de los operadores se encuentra por encima de los 400 mil litros mensuales, mientras que hace apenas tres años rondaba los 300 mil. “El panorama es complicado para las bocas chicas y las blancas”, asegura.

El servicio de playa, que permite adicionar centavos a las estaciones sobre el litro de nafta, sobre todo a los comercios de YPF, que funcionan en reventa, no suena para el dirigente como una opción apropiada en el actual contexto: “creo que habría que buscar alternativas para paliar la nueva paritaria; hay que pedir al Gobierno Nacional y Provincial reducciones de los impuestos, sino se carga toda la tinta al consumidor”. El temor es que ante nuevas subas en los surtidores caiga la demanda y el panorama se agrave.

Gianello pone el acento en Impuesto a la Transferencia de los Combustibles (ITC), Ingresos Brutos y el Impuesto al cheque. “Afectan directamente al margen”, sostiene. El expendedor entiende que es uno de los desafíos del sector para conversar con las nuevas autoridades.

Aranguren aseguró que el precio de las naftas “bajará”

El Ministro de Energía, Juan José Aranguren vaticinó el descenso del precio de los combustibles, aunque lo condicionó al logro de la competitividad por parte de la industria petrolera y que la inflación disminuya.

“Los combustibles aumentan porque Argentina estuvo durante muchos años a contramano del mundo. Cuando tengamos precios competitivos y la inflación disminuya, tendremos un descenso en el costo de las naftas”, puntualizó.