Como pocas veces antes, los expendedores que comercializan naftas y gasoil sin marcas están ilusionados. Es que el ingreso de PDVSA al negocio de la destilación de combustibles en la Argentina les abre un panorama expectante para conseguir el abastecimiento pleno y encima, a precios de mercado.

El referente de este segmento, el presidente de la Asociación de Estaciones de Servicio Independientes, Manuel García, reveló que buscarán contactarse con la petrolera venezolana para efectivizar un vínculo comercial. “Hoy buscan instalarse, pero en los próximos años será una de las grandes del país”, sentenció el directivo.

El anuncio del ministro de Planificación Julio De Vido apunta a que el montaje de una planta refinadora hará posible el camino hacia la solución de la escasez de combustibles Pero no sólo eso, también combatir “el control oligopólico” de los actuales operadores, una figura cada vez más instalada luego de la denuncia efectuada contra las petroleras por parte de las autoridades.

García se entusiasma con esa perspectiva. “Es una oportunidad para nuestro sector”, manifestó. “Si el Gobierno se anima y tiene la capacidad de generar condiciones atractivas, todo puede cambiar para mejor”, opinó. Claro que para su entender, se debe aplicar “cirugía mayor” de manera de resolver la crisis energética en la que hoy está inmerso el país.

“Las privatizaciones petroleras arrojaron consecuencias nefastas”, sentenció. Al respecto el  titular de AESI explicó que en estos últimos diez años “desaparecieron” 2.000 millones de barriles de petróleo. “Se sacaron de nuestro suelo pero nunca se repusieron tal como lo exigen las reglas básicas de la exploración petrolera”, sostuvo García, quien valuó la evasión en 200 mil millones de dólares.