En los centros vacacionales de la costa bonaerense, las Estaciones de Servicio que esperaban recuperar su nivel de ventas en enero, luego de un 2020 atravesado por la pandemia, se toparon con la realidad de que el promedio está por debajo de un 30 por ciento de los límites normales de la temporada.

“De acuerdo a las estadísticas del municipio, sabemos que oficialmente estamos con un promedio de 3 mil casos activos, lo cual supera la máxima de contagios que habíamos tenido en los picos de invierno dentro de Mar del Plata”, confió a surtidores.com.ar el vicepresidente de la Cámara de Expendedoras marplatense, Patricio Delfino.

Con desilusión, comentó que son numerosos los playeros de diferentes establecimientos que hoy están aislados por haber contraído COVID, pero que, por suerte, ninguno de ellos atraviesa un cuadro de salud grave.

El empresario ratificó lo que ya había adelantado a fines de diciembre: “No pudimos tomar empleados extras de manera temporaria como solemos hacerlo todos los veranos, lo cual también nos duele por ellos y sus familias a quienes conocemos desde hace mucho”.

Esta situación también se da en las operadoras de combustibles de la costa atlántica, un revés para los estacioneros que están a punto de comenzar con las reuniones paritarias, ya que el último acuerdo firmado con SMATA venció el 31 de diciembre pasado.

“Estamos expectantes por lo que pueda suceder el resto del 2021, porque con la ayuda estatal que tuvimos el año pasado pudimos sostener el nivel de la plantilla de personal de cada una de nuestras Estaciones de Servicio, pero no estamos en condiciones de poder sustentar la misma cantidad de trabajadores en un contexto como este, si se sigue extendiendo la crisis”, advirtió Delfino.

POCOS VISITANTES

Para el dirigente “era obvio” que esta temporada de vacaciones iba a ser baja para Mar del Plata, al igual que otros grandes balnearios de la costa. “La gente que puede prefirió ir a lugares con playas más pequeñas y menos estructura hotelera que permitiese un mejor aislamiento”, observó.

Advirtió que ante esta situación serán numerosos los hoteles y locales comerciales que “van a cerrar sus puertas en poco tiempo, lo que afectará notablemente la venta de combustibles, impactando negativamente en nuestro sector”, sopesó.