Más controles
Más allá de que el índice de siniestralidad a causa de eventos naturales como vientos, tornados y tormentas en las estructuras de los establecimientos de ventas de combustibles es bajo, los expertos tienen en cuenta la prevención contra hechos inesperados provocados por el clima.
La semana pasada, los fuertes vientos y remolinos acompañados de lluvias y tormentas eléctricas volaron techos, tiraron árboles y postes de luz, hubo cortes del suministro eléctrico y del servicio de teléfono. También hubo destrozos en edificios y se cayeron tinglados y balcones en la Ciudad de Buenos Aires y diferentes zonas de la Provincia.
Esta situación que no se daba desde el año 2012, y que en ese momento había dejado Estaciones de Servicio con roturas y caídas en las cenefas, no afectó sin embargo a las expendedoras actuales, salvo en predios que están cerrados sin trabajar desde hace muchos años.
Esto obedece en parte al avance en materia de prevención que las empresas constructoras de bocas de expendio tuvieron con el correr de los años, para adaptarse a las exigencias de las compañías petroleras y empresarios del sector.
“Las condiciones de construcción están regidas por las normas de seguridad e higiene de las autoridades competentes y en eso trabajamos cada día, con el objetivo de brindar la mejor tecnología y tranquilidad al operador, su personal y sus clientes”, dijo a surtidores.com.ar, el apoderado de OPECO, Osvaldo Donato Cristinziano.
Agregó que los accidentes por eventos climáticos suelen deberse a errores en la construcción debido a algún detalle que pudo haber quedado sin saldar, pero aclaró que lo que es la cuestión de planificación se encuentra controlada y cumple con protocolos, que eliminan la incertidumbre.
Finalmente subrayó que “el territorio argentino es muy variado en cuanto a geografía y ambiente natural, lo que lleva a los constructores a tener en cuenta diferentes condiciones al momento de avanzar con una obra de la magnitud de una Estación de Servicio”.
Acivar/desactivar voz
Leer página