La recepción de un camión es una de las tareas más críticas de la actividad de una estación de servicio. Exige nuestra máxima responsabilidad, no sólo por la seguridad de las personas, instalaciones y del medio ambiente, sino también para verificar la calidad de los productos a descargar en los tanques.

Sin posibilidades de verificar su composición cualitativa, podemos comprobar en forma visual que sea el correspondiente a lo solicitado y su aspecto sea el adecuado. A continuación una breve guía para llevar adelante la tarea sin complicaciones.

Levantar la tapa correspondiente al producto que se va a descargar y abril la de la boca de llenado del tanque.

Simultáneamente, el transportista utiliza un balde galvanizado -provisto por la estación-,  para hacer contacto con la válvula de descarga del camión (que deberá estar cerrada), a fin de eliminar la corriente estática.

El transportista realiza una extracción (purga) en el balde de aproximadamente 3/4 partes de su volumen desde la boca de descarga.

El responsable de la descarga deja estacionar el producto y observa:

• Color
• Aspecto (turbidez, sólidos en suspensión, etc.) / Espuma y lubricidad (para el caso de Gas Oil)
• Sólidos decantados en el fondo del balde
• Agua separada.

Si el aspecto es adecuado se debe volcar el contenido del balde en el tanque correspondiente, realizando el contacto con el embudo metálico colocado en la boca del tanque, en cambio si no es adecuado repetir la operación de extracción desde la boca de descarga en el balde y reiterar la observación.

• Si en esta instancia está conforme, el proceso continúa.
• Si no está conforme, rechazar la cisterna.

Finalmente se debe realizar la verificación de trazadores (Decreto 1129/2001), utilizando para ello los reagentes, de acuerdo al instructivo que indica el fabricante.