Desde el 1 de marzo, el precio del gas natural en el punto de ingreso al sistema de transporte destinado al suministro de gas natural comprimido en estaciones de servicio, aumenta a 0.8925 pesos por metro cúbico.

La suba, del seis por ciento respecto al mes anterior, nada tiene que ver con el esperado ajuste de tarifas anunciado por el Ministro de Energía y Minería Juan José Aranguren. Responde a los dictados de la resolución 231/14, que dispuso que el gas en boca de pozo para bocas de expendio se modificará en el mismo porcentaje en que lo haya hecho el precio promedio ponderado, sin impuestos, país en planta de la nafta súper de más de 93 RON.

En ese sentido, el costo del fluido no hace más que acompañar la escalada del combustible líquido que trepó en enero a consecuencia de la devaluación del peso. Y seguramente tampoco será el último ya que se espera un nuevo incremento para estos días de un índice similar.

En definitiva este es la 16º vez que se modifica el valor del combustible desde que se implementó la normativa en noviembre de 2014 y la tercera de este año. Acumula 20 por ciento desde marzo, mes que replicó la baja decidida por el entonces gobierno de Cristina Kirchner para acompañar la baja del crudo.

El nuevo cuadro tarifario

El ministro de Energía y Minería estimó que los aumentos se producirán en “marzo o abril”, antes de que se inicie la temporada de invierno. Las nuevas tarifas tendrán aumentos similares a los ya impulsados en la luz, que según el nivel de consumo del usuario contemplan incrementos de hasta un 300 por ciento. “Lo haremos lo antes que se pueda para que mejoren las condiciones del servicio y de la oferta. Cuanto más rápido lo podamos hacer, mejor“, explicó el funcionario.

No obstante, las bocas de expendio pagarán poco más de $ 52,50 por millón de BTU (la unidad de medida), que representa un incremento del 41 por ciento.