Las colas en las estaciones de servicio, la escasez de naftas y los constantes aumentos de precio, fueron el mejor argumento para que los automovilistas vuelvan a inclinarse por la utilización del GNC como combustible vehicular. Así lo aseguran las estadísticas oficiales que difunde mensualmente el Ente Nacional Regulador de Gas, que destacan el notable crecimiento del consumo del combustible gaseoso durante el primer semestre del año.

Según la dependencia en base a datos de las Licenciatarias, la demanda del fluido en los primeros seis meses de 2011 alcanzó los 1.315.863 miles de m3 de 9300 kcal, 27.213 sobre los 1.288.650 del mismo período pero del año anterior, ocupando el 7.3 por ciento de la canasta gasífera.  

El porcentaje de consumo se incrementa si se comparan los expendios de junio en ambos años. El volumen despachado en las estaciones de servicio se acrecentó 3.6 por ciento, alcanzando ese mes los 228,87 millones de metros cúbicos. Y se expande mucho más aún si se efectúa un cotejo intermensual con mayo, superando el 7.75 por ciento.         

El salto ilusiona y en el sector comparan la situación con las épocas doradas del GNC, cuando los surtidores estaban abarrotados de autos esperando cargar. En este sentido vale destacar el aumento de las conversiones que ya rondan las 12.000 conversiones por mes, totalizando un parque vehicular de más 1.900.000 unidades que funcionan con este combustible.

“Hoy gracias al GNC muchos vehículos pueden circular, en muchos casos como única alternativa”, sostuvo el presidente de la Cámara Argentina de GNC Fausto Maranca, para explicar las razones el crecimiento del combustible.