Estaciones del futuro: autos eléctricos y con contratos de las distribuidoras

Días atrás se realizó la primera reunión en el marco de la Mesa de Vehículos y Movilidad Alternativa, convocada por el Ministerio de Producción, para entre otras cuestiones analizar alternativas legales que permitan la circulación de autos propulsados a partir de la energía eléctrica. La idea es también impulsar un plan de desarrollo industrial.

Una vez que esté en marcha, quizás este año o tal vez el próximo, todo indica que el mercado avanzará en este tipo de transporte, tal como ocurre actualmente en los países desarrollados. Uruguay, sin ir más lejos, está haciendo sus primeros pasos en este sentido.

¿Cómo funcionarán las bocas de carga? Mariano Luis Jimena, Secretario General del Concejo Directivo la Asociación Argentina de Vehículos Eléctricos y Alternativos (AAVEA) considera que “una buena idea es aprender de los ejemplos de los demás países que ya tienen cierta experiencia en crear estas infraestructuras”.

Puso como ejemplos a “Italia, Francia, Noruega, Holanda, EEUU y Japón, donde también están incluyendo a las renovables como fuente de energía”.

En el caso local entiende que “el Estado tendrá que reunirse con las empresas de servicios eléctricos que más experiencia y conocimiento tengan de estos temas”.

Bajo este esquema, los expendedores minoristas que hoy comercializan naftas y gasoil pasarán entonces a firmar contratos directamente con las distribuidoras de energía, en el caso de Capital Federal y Gran Buenos Aires, EDENOR y EDESUR.

“Siempre hay que tener en cuenta la necesidad de la previsibilidad, ya que este proceso será gradual, y si comenzamos ahora, seguro tendremos la infraestructura necesaria cuando los vehículos eléctricos sean masivos”, sostuvo Jimena.

¿Cómo juegan las petroleras? El dirigente aclara que “no hay un lobby explícito, aunque tampoco se puede decir que están interesadas”.

Es que para Jimena no se les terminará el negocio: “Al fin y al cabo van a seguir vendiendo combustibles a las usinas. Dado que vemos a la movilidad eléctrica como una alternativa competitiva en cuanto a emisiones y rendimiento sabemos que ambas tecnologías van a convivir por varios años”.