Una violenta explosión y posterior incendio causó un camión cargado con 20.000 litros de combustible en momentos que descargaba en una estación de servicio ubicada en la ciudad de Melbourne, Australia. Un rayo podría ser el culpable ya que la operatoria se realizaba en medio de una fuerte tormenta eléctrica.

Fueron más de 100 bomberos quienes evitaron un desastre mayor. Después de 11 horas de tarea lograron apagar el fuego que se había extendido a 150 metros de altura. Los daños materiales fueron cuantiosos, incluyendo dos automóviles fueron devoradas por las llamas mientras que otro fue dañado.

A pesar de la gravedad del accidente, el conductor del camión de 35 años de edad, salvo su vida pero sufrió graves quemaduras. Permanece en estado grave pero estable en el Hospital Alfred

Un grupo de personas hospedadas en un hotel frente a la estación, consiguió escapar antes de que el fuego alcanzara a consumir parte del lugar. “Pudimos ver el fuego y sentimos el humo y el calor“, comentó un testigo. El pánico se apoderó de los presentes. “Fue una locura salir de allí, cundió el pánico en todo el mundo“. “Tuvimos que dejar los coches aquí y escapar“, aseguró otro.

Un violento accidente ya se había producido hace pocos meses atrás en la ciudad  australiana de Perth, cuando un camión cisterna se encontraba descargando combustible. Una chispa originada por la electricidad estática causó la explosión del vehículo cargado con 45.000 litros de hidrocarburo obligando a la evacuación de hogares y negocios dentro de un radio de medio kilómetro.

El espectacular incendio del rodado provocó llamas de varios metros de altura aunque los tanques subterráneos se salvaron de ser alcanzados evitando lo que podría haber sido una catástrofe aun mayor.