La prohibición de aumentar los precios de los combustibles por 90 días finalmente se tradujo en una mayor actividad en los surtidores. Así lo confirma un informe realizado por la Secretaría de Energía en base a datos aportados por los expendedores de todo el país respecto a las ventas efectuadas durante el mes de septiembre.

De acuerdo al relevamiento oficial, el consumo de naftas y gasoil al público escaló 4.89 por ciento interanual, aunque el detalle sobresaliente es la recuperación de la demanda de nafta Premium tras 14 meses de caída ininterrumpida, y la de diésel Grado 3 luego de 11.

Durante ese período se había producido una fuerte migración de automovilistas hacia combustibles de menor calidad pero sensiblemente más baratos. Hasta junio inclusive, la retracción fue superior al 20 por ciento. En julio y agosto, en cambio, la demanda registró valores negativos pero de menor magnitud.

No obstante y si bien el comparativo refleja una mejora considerable respecto a lo sucedido un año atrás, no debe soslayarse que durante las primeras horas del 1º de septiembre de 2018 las petroleras aplicaron un fuerte aumento del 12 por ciento sobre los precios de pizarra que derrumbó los índices de consumo de ese mes.

SUBA GENERAL

Según el documento, el producto que más creció fue el gasoil Grado común, 8.13 por ciento, seguido por de máxima calidad, 3.96 por ciento; la nafta Grado 3, 3.74 por ciento y la súper, 3.11 por ciento.

En cuanto al desempeño de las empresas, Puma Energy fue la de mayor expansión, con una mejora interanual en los litros vendidos del 24.5 por ciento; seguida por Raízen, 11.8 y AXION energy, 6.7. YPF en tanto, se mantuvo en los mismos niveles de venta que un año atrás.