Shell sigue siendo el principal proveedor mundial de lubricantes, galardón que recibe por 14º año consecutivo, según la 18ª edición de Global Lubricants de Kline & Company.

Utilizando 2019 como año base, el informe cubre los principales mercados de países consumidores de lubricantes, tipos de productos y formulaciones. Shell mantiene la posición de liderazgo mundial en las tres categorías analizadas por Kline: automotriz de consumidor final, automotriz comercial e industrial.

“Catorce años consecutivos como primer proveedor mundial de lubricantes demuestran el compromiso inquebrantable de Shell con nuestros clientes y la fortaleza de nuestra cartera de productos superiores“, dijo Carlos Maurer, vicepresidente Ejecutivo Comercial Global de Shell. “Y no sólo somos líderes en un sector. Somos líderes a nivel mundial en las tres categorías analizadas por Kline: automóviles, camiones y equipos industriales”, agregó.

Maurer sostiene que los lubricantes son una prioridad de crecimiento para Shell, “por lo que a medida que las necesidades de nuestros clientes cambian, nosotros también lo hacemos”.

En ese sentido, se refirió a los desafíos que propuso la pandemia de Covid-19: “Nuestro negocio de lubricantes suministró aún más productos de primera calidad al mercado, desempeñando un papel vital para mantener el mundo en movimiento y la maquinaria funcionando eficientemente”, puntualizó.

De cara al futuro, el ejecutivo expresó que “nuestros clientes quieren más productos que ofrezcan un mayor rendimiento con menos emisiones, utilizando menos recursos naturales y menos residuos, y verán cómo Shell Lubricants amplía su cartera de productos para satisfacer esa demanda.”

Según el informe de Kline, Shell mantuvo su cuota de mercado global líder en 2019 en relación con el año anterior, con un ligero aumento sobre el siguiente mayor proveedor. Los volúmenes totales vendidos por Shell fueron de aproximadamente 4.500 kilotoneladas de lubricantes terminados, lo que equivale a unos 5.000 millones de litros. Estas ventas globales se repartieron casi por igual entre tres segmentos y en el mismo porcentaje que el año anterior: consumo para automóviles (34 por ciento), industrial (36) y automoción comercial (30).

INNOVACIÓN, CALIDAD Y SEGURIDAD

Shell tiene un historial de innovación en materia de lubricantes. Fue la primera empresa en comercializar aceites más limpios y puros fabricados con gas natural y amplió su cartera de Shell E-Fluids, de modo que ahora es compatible con los sistemas de propulsión eléctricos de batería (BEV) y de pila de combustible (FCEV) para todos los vehículos de pasajeros y comerciales. Además, Shell también ha formado una alianza estratégica con Kreisel Electric para ofrecer un sistema de tecnología de baterías combinado que brinda una eficiencia de carga rápida líder en la industria, así como una seguridad y estabilidad superiores.