Luego del reciente aumento de precios aplicado por las compañías petroleras, la nafta grado 3 alcanzó una de las mayores diferencias históricas con la tradicional Grado 2. La brecha entre ambas calidades se estiró hasta rozar el 20 por ciento, mientras que días atrás esta disparidad era del 16.

La ampliación de la diferencia tiene su justificación en que el combustible Premium proviene casi en totalidad del exterior, situación que demanda un mayor desembolso de dólares. “La usa un segmento de consumidores que está dispuesto a pagarlo”, justificaron desde una de las principales empresas a surtidores.com.ar.

La desregulación del mercado y las declaraciones del flamante Ministro de Energía de no intervenir en los precios habilita a las refinadoras a tomar este tipo de decisiones. “Con la súper es más difícil porque afectaría los índices de consumo y además caería la actividad de las Estaciones de Servicio”, agregó la fuente.

Esta estrategia para recomponer, aunque sea en parte, el margen que las compañías resignan comercializando hidrocarburos a menos valor de lo realmente cuestan, no es la única. A excepción de YPF que está abasteciendo a su red sin limitaciones, el resto comenzó a aplicar cupos al suministro. Hasta el volumen que distribuían el año pasado entregan sin inconvenientes, pero por sobre ese límite se deben pagar precios diferenciados.

Lo misma regla rige para los distribuidores mayoristas. En este caso la distorsión la padecen los estacioneros sin marcas, ya que con estos importes quedan desfasados del contexto general. Al respecto, desde la Cámara de Estaciones de Servicio de Santiago del Estero, su Presidente, Pedro LLorvandi, asegura que “hace varios días que no abren sus puertas por no poseer combustibles para expender”.

A su vez, el dirigente de la Cámara empresaria de Jujuy, Víctor Lamberti, explicó que “la imposición de un cupo por las petroleras tiene que ver con el precio, ya que no les conviene refinar un producto al valor del dólar de 20 pesos, cuando en realidad en el mercado está en 30 pesos; para las petroleras no es negocio, entonces venden lo indispensable y ponen cupo”.