Expendedores y gremialistas volverán a encontrarse durante la jornada de hoy de manera virtual frente a la atenta observación de funcionarios del Ministerio de Trabajo, con intenciones de definir la escala salarial correspondiente al período 2020/21.

Según pudo averiguar surtidores.com.ar, los empresarios llevarán a esta sexta reunión paritaria una nueva oferta superadora de las anteriores. Sin embargo, la postura del Sindicato que lidera Carlos Acuña,  sería la de no aceptar otra oferta que el reconocimiento del 100 por ciento de las horas extras trabajadas los sábados y domingos.

Así lo reconoció el Secretario de la Filial del SOESGyPE, filial Entre Ríos, Omar Biderbos, quien mediante un comunicado dejó sentada su posición. “Por el momento no se ha llegado a ningún acuerdo salarial con respecto a los convenios correspondiente a los meses de abril  de 2020 en adelante, como en otras provincias (Santa Fe es una de ellas) que ya han incorporado el 12 por ciento dividido en 3 meses (agosto, setiembre y octubre)”, dijo.

Por su parte, mostrando un ánimo conciliador, el presidente de la Cámara de Expendedores de Entre Ríos, Héctor Martínez, declaró en diálogo con surtidores.com.ar que “seguramente vamos a ponernos de acuerdo con los porcentajes de aumento salarial que pide el gremio, como siempre lo hemos hecho”.

Pero mostró su negativa por aceptar la condición de asumir el pago de horas extras en su totalidad como lo plantean los trabajadores, porque a su entender, “no es reglamentaria dentro de la ley de contratos de trabajo ya que las jornadas en fines de semana y feriados, se cubren de manera rotativa y complementaria entre el personal”.

Martínez aseguró que “es evidente que en un momento de crisis sanitaria que nos dejó a todos con un derrumbe inédito en las ventas, resulta imposible plantear un cambio de este tenor”, pero admitió que “en otro momento, cuando la situación se mejore, “podremos discutir ese y otros temas”.

Al respecto, expresó que “asumir un costo para los fines de semana implicaría no menos de 18 mil pesos por día y por empleado, que en el presente de recesión nos es incumplible, más allá de la buena voluntad que podamos tener”.