El mercado de los combustibles vivió intensas modificaciones en los últimos años, a partir de que el parque automotor superó todos los récords de producción, al tiempo que se redujo la cantidad de bocas de expendio. Uno de ellos, fácil de observar, tiene que ver con el promedio de rodados que pasan por local, mucho más alto que en décadas anteriores.

Esta tendencia se profundiza aún más en el actual escenario de precios, ya que YPF se ubica en el podio de las preferencias de los usuarios. Roberto Asato, Coordinador del área de los Combustibles Líquidos de la Secretaría de Energía de la Nación descartó encarar una actualización de la legislación para regular este tema: “la normativa no está condicionada a la cantidad de autos en circulación”.

Asato indicó que este punto no fue incluido en el paquete de medidas que está siendo estudiado por la titular de la cartera Mariana Matranga, la reemplazante de Daniel Cameron, que supone una actualización de las normas de seguridad para las bocas de expendio, en puntual de la Resolución 404/94.

Respecto del uso del celular, otro de los hábitos que se incorporaron a la vida social, Asato brindó el punto de vista de la Secretaría: “Lo que se recomienda a la gente es que no lo utilicen”. Es el consejo indicado ante la duda sobre sus advertencias de que puede causar una explosión durante la carga de combustible.

Dado el cumplimiento de los operadores, Asato resaltó que “no se producen accidentes porque las estaciones son realmente seguras; desde lo operativo no hay inconvenientes”. Agregó a las blancas, que no tienen los controles extras de las petroleras.

Siguiendo la idea, Asato sostuvo que todos los comercios deben presentar los certificados de las auditoras autorizadas por la Secretaría de Energía que evalúan el estado de los tanques y de la superficie. “Los operadores respetan este punto porque si no quedan inhabilitados para funcionar”, explicó. “El que no cumple no puede estar en la web de la Secretaría; y si no está en la web, el proveedor no le puede vender”, insistió.