El gobierno nacional puso en venta los pliegos de licitación para la construcción del último tramo previsto de los controles centrales del Gasoducto del NEA (Nordeste Argentino). De acuerdo a la previsión de la empresa, la obra podrá estar finalizada en diciembre o enero del año próximo.

La red troncal originalmente fue concebida como una obra para abastecer de gas natural a más de 3,5 millones de habitantes en las provincias de Salta, Formosa, Chaco, Santa Fe, Corrientes y Misiones; aunque la revisión del proyecto postergó la extensión de la obra a las últimas dos provincias.

El fin de la obra posibilitará la apertura de nuevas Estaciones de Servicio de GNC y junto con ello, la de otros rubros asociados. En ese sentido, Hugo Lamy, Presidente de la Cámara de Instaladores de Equipos, saludó la iniciativa al tiempo que consideró que “estimula la cadena de valor de la industria”.

“Será una muy buena opción para quienes hasta ahora no contaban con GNC”, expresó en contacto con surtidores.com.ar. “La región será muy competitiva, ya que es la única que contará con tres tipos de combustibles diferentes: Líquidos, GLPA y GNC”, señaló.

Lamy consideró que será un buen impulso para el sector. No obstante para aplacar las expectativas, pronosticó que el negocio de los instaladores es el que crecerá más rápidamente mientras que la instalación de las bocas de expendio se desarrollará más lentamente, “una vez que se haya consolidado el abastecimiento”.

En ese sentido, la empresa estatal adelantó que no hay aun garantías para asegurar su funcionamiento por falta de gas suficiente proveniente de Bolivia para atender la demanda proveniente -en particular en los meses de invierno- de las provincias comprendidas en el GNEA.

Es que el gas que remite el país vecino apenas alcanza para alimentar el Gasoducto Norte, por lo cual el gobierno anticipó desde el Ministerio de Energía la idea de alimentarlo desde el sur del país.