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Lunes, 15 de diciembre 2025
Tras la reglamentación del Gobierno
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Estacioneros de distintas provincias ven útil la incorporación de módulos móviles para llegar a zonas sin servicio, pero piden que operen con las mismas reglas, distancias y controles que una estación fija para evitar competencia desleal y ordenar la convivencia con la red existente.
El Gobierno nacional reglamentó recientemente la operatoria de las estaciones móviles y abrió la puerta a un nuevo formato de expendio que podrá ubicarse en zonas donde no hay oferta de combustibles. La norma habilita módulos transportables capaces de prestar servicio sin la infraestructura completa de una estación fija, algo pensado especialmente para pequeñas localidades o parajes donde la demanda no alcanza para justificar inversiones mayores. La medida generó interés inmediato en el sector, que valoró la iniciativa pero pidió precisiones sobre su implementación.
Desde San Juan, Miguel Caruso, presidente de la Cámara de Expendedores local, planteó que el primer punto a resolver es la distancia mínima entre un módulo móvil y una estación ya instalada. En diálogo con Surtidores, explicó que los operadores tradicionales trabajan con estructuras fijas, protocolos y obligaciones que no pueden trasladarse, por lo que la ubicación de las nuevas instalaciones puede impactar en la actividad cotidiana de los establecimientos existentes.
El empresario cuyano señaló que la modalidad puede funcionar en comunidades pequeñas donde no se logró montar una estación convencional. Pero advirtió que todavía falta definir cómo se abastecerán los módulos, si tendrán bandera o serán “blancos”, y bajo qué criterios se controlará su operatividad.
A su vez, el presidente de la Cámara de Estaciones de Servicio de Tucumán, Sebastián Vargiu, coincidió en que el sector puede acompañar la iniciativa siempre que “las exigencias sean las mismas que para las instalaciones físicas”. Indicó que no debe haber diferencias en las condiciones de habilitación ni en los requisitos técnicos que luego puedan generar ventajas operativas entre formatos.
El dirigente norteño consideró que los módulos permitirán cubrir zonas donde hoy no hay estaciones y donde la demanda no alcanza para un proyecto de mayor escala. Sin embargo, insistió en que la normativa debe fijar parámetros claros de funcionamiento para evitar conflictos entre operadores.
Desde la Federación de Expendedores de Naftas del Interior, su presidente, Alberto Boz, afirmó a este medio que el sector no plantea objeciones a la incorporación de estaciones móviles, pero remarcó que deben “cumplir con todas las normas que cumple una estación fija”, especialmente en materia de seguridad, abastecimiento y controles ambientales.
Con estas posturas sobre la mesa, los referentes del ámbito de venta de combustibles coincidieron en un punto central: la incorporación de módulos móviles puede integrarse al sistema y mejorar la cobertura en zonas sin servicio, siempre que la regulación establezca distancias mínimas, obligaciones equivalentes y parámetros técnicos uniformes que permitan una convivencia ordenada con la red existente.
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