Los empresarios del rubro de estaciones de servicio valoran que se haya implementado durante los primeros meses de la pandemia el Programa de ATP, por el cual, con la contribución estatal, se pudieron pagar la mitad de los haberes de los trabajadores de las Estaciones de Servicio.

Sin embargo, con el correr de la pandemia, muchos empresarios abandonaron la intención de continuar solicitando esta suma por parte del gobierno, a causa de condiciones que fue imponiendo el fisco.

Paralelamente a ello, otros estacioneros que solicitaron el ATP, recibieron la negativa por  haber superado una media de facturación y demás detalles del decreto que para muchos quedó desactualizado con la reactivación progresiva de la economía desde el 13 de marzo hasta el presente.

Al respecto, el presidente de la Cámara de Estaciones de Servicio de Formosa, Ángel Luis Bigatti, advirtió que actualmente, el ATP se transformó en una “herramienta de intervención estatal a la empresa privada”, por la cantidad de requisitos muchas veces incumplibles para los establecimientos de bajo nivel de expendio. En ese sentido, rechazó también la prohibición gubernamental de realizar despidos hasta fin de año.

“Los más perjudicados hoy son los dueños de expendedoras que para la AFIP son contribuyentes unipersonales, es decir, autónomos, porque a muchos que tienen otras actividades o realizaron operaciones que no se relacionan con la venta de combustibles, les cortaron la posibilidad de acceder a los ATP”, dijo Bigatti a surtidores.com.ar, quien además es contador público y experto del negocio desde hace tres décadas.

Ejemplificó que es común que haya expendedores que además se dediquen a la producción agropecuaria en pequeña escala o que hayan tenido que vender algunos activos. “Estos casos, fueron dejados afuera de la ayuda del gobierno porque el ente recaudador considera al autónomo como una sola unidad, con lo cual, le cuenta la facturación neta sin diferenciar qué tipo de actividad es la que realizó”, explicó Bigatti.

Diferente es el caso de las firmas que son SRL o SA, porque la AFIP calcula el nivel de facturación de la persona jurídica, aunque por efectos de la inflación y la devaluación, en numerosas ocasiones también los montos son muy superiores al mismo período del año pasado, lo que los deja sin chances para el ATP.

De acuerdo a lo que Bigatti detalló, “existe una solución integral al problema de los ATP, que sería un incentivo a la inversión en el negocio estacionero y generador de empleo más allá de cualquier circunstancia económica política o social”, sostuvo.

Agregó que se deben reemplazar estos subsidios, que en otros caso se trasforman en préstamos a tasa baja, por una reforma fiscal que permita al empresario deducir del monto del IVA, del pago de sueldos de los empleados y contribuciones a la seguridad social.

“Cuando pagamos sueldos estamos asumiendo el costo de un valor agregado ajeno, lo que atenta contra la capacidad contributiva de los estacioneros”, destacó.

Finalmente llamó a que se eximan las obligaciones patronales, en lugar de postergarlas para más adelante como sucede hoy con las moratorias.