No tiene factibilidad práctica
La Resolución 4/2025 habilitó la posibilidad que las Estaciones de Servicio y otros comercios puedan exhibir los precios de sus bienes y servicios en otras monedas, además de pesos argentinos.
La reciente Resolución 4/2025, que habilita la posibilidad de que las Estaciones de Servicio y otros comercios exhiban los precios de sus bienes y servicios en otras monedas además de pesos argentinos, ha generado opiniones divididas. Mientras algunos sectores evalúan la medida como una forma de aportar mayor claridad, referentes del sector de los combustibles señalan que la implementación carece de utilidad práctica.
Pedro Llorvandi, miembro de la Cámara de Expendedores de Santiago del Estero e integrante del Consejo Directivo de CECHA, expresó que la medida, aunque técnicamente viable, no parece tener factibilidad en la vida cotidiana de las Estaciones de Servicio. “En nuestro rubro no lo veo que vaya a ser algo que tenga factibilidad práctica. Puede tener técnica, de que hay algunos colegas que lo pongan, pero en la práctica en la Argentina el combustible siempre se ha comprado y transaccionado en pesos”, señaló.
Desde ahora las Estaciones de Servicio podrán exhibir el precio de los combustibles en dólares
Llorvandi destacó en diálogo con surtidores.com.ar que la tradición de comercializar combustibles en pesos argentinos responde al tipo de consumidor al que se dirige este mercado. “El consumidor del combustible es distinto al de rubros, donde sí es común establecer precios en dólares debido a que estos bienes tienen una vinculación más directa con el mercado internacional”, explicó.
Según el dirigente, en sectores como el inmobiliario o el agrícola, donde un patrón común como el dólar permite establecer referencias claras en diferentes regiones del país, la medida resulta más aplicable. En contraste, el mercado de combustibles opera con una dinámica de consumo masivo que está profundamente arraigada al peso como moneda de transacción.
Si bien algunos operadores podrían adoptar la exhibición de precios en dólares, Llorvandi consideró que esta opción no resolvería las dificultades económicas del sector ni mejoraría la experiencia del consumidor. “Estamos hablando de usuarios con necesidades y hábitos distintos a quienes adquieren bienes como automóviles o propiedades. No veo que la posibilidad de exhibir precios en dólares ofrezca ventajas concretas para las Estaciones de Servicio”, afirmó.
Llorvandi también subrayó la importancia de mantener un enfoque pragmático en las soluciones para el sector. “En un contexto donde el consumidor ya enfrenta aumentos constantes en los precios de los combustibles, sumar una cotización en dólares podría generar confusión sin aportar un verdadero beneficio”, concluyó.
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Lo mejor sería colocar los precios en efectivo y con tarjetas, porque los pagos con las tarjetas te comen el margen de ganancia que tenemos en el combustible, el pago en efectivo sería a precio de cartel, y el pago con tarjeta tendría que ajustarse a las comisiones que cobran los bancos.