Las estaciones de servicio viven realidades muy distintas. Las que en mejor situación se encuentran son las duales, es decir, aquellas que también ofrecen combustibles líquidos. Pero en el caso de las que venden gas, hay locales que mantienen el volumen que se despacha sin cambios, con el agravante de que los costos fijos suben por los aumentos de salarios y los efectos de la inflación.

Según comentó a surtidores.com.ar Eduardo Bajlec, operador independiente con trayectoria en el sector, se está vendiendo más cantidad, pero con márgenes acotados. No obstante, el expendedor aclaró que no todos los comercios se encuentran en la misma situación. “Hay algunas bocas que venden incluso menos que antes”, diferenció. Como en algunas zonas se han instalado nuevas estaciones de servicio de GNC al tiempo que otras que ofrecen combustibles líquidos insertaron surtidores de gas, el empresario mencionó que “hay establecimientos muy comprometidos”.

“Cuando se venden más de 100 mil metros cúbicos empieza a ser rentable la actividad”, confió a este medio. Aunque aclaró que no todas las bocas alcanzan a despachar estos valores. “Por debajo de esa cifra no es negocio”, advirtió.

Si bien las estadísticas oficiales muestran un aumento de la demanda de gas, el impacto de esta tendencia varía en cada comercio. “Hay bocas que no lo sintieron para nada mientras que otras mejoraron la cantidad”, afirmó. “El promedio de gas que venden las bocas de expendio se mantiene porque abren nuevas estaciones”, indicó.

Bajlec contó que la intención de algunos expendedores de GNC es mantener los precios bajos para estimular a los consumidores a instalar equipos. “Necesitamos que crezcan las conversiones”, expresó. Y especuló que en los próximos años se va a notar aún más el aumento del parque vehicular que circula a gas. “Somos optimistas”, dijo.