Si hace dos años se hablaba de paneles solares, la gran mayoría de los estacioneros no pensaban en inversiones para sus negocios o quizás, era algo que sólo convenía en otros países.

Lo cierto es que tras quita de subsidios al consumo eléctrico, fuertes campañas de concientización y un recambio generacional de líderes, en este 2023 se han multiplicado las solicitudes de estudios de pre proyectos para la instalación de paneles solares en las Estaciones de Servicio.

Daniel Holmes, responsable comercial de obras y servicios de ARYES Energías, comenta que hoy en día es un gran momento para invertir en esta tecnología, ya que existen, por primera vez, distintas herramientas de financiación, sumado a la suba de tarifas que si bien es paulatina, se prevé que aumenten aún más en el mediano plazo.

“Incluso si el proyecto se hace en etapas, es mucho más atractivo para los estacioneros, ya que el estudio se hace antes de iniciar y, a medida que se pueda volver a invertir, el ahorro crece”, comenta el ejecutivo, en diálogo con surtidores.com.ar.

Asimismo, añade que si la distribuidora de energía a la que se tiene acceso desde la estación está adherida a la ley de generación distribuida, el usuario puede llegar a acceder a un crédito fiscal.

“Estamos hablando de costos de instalación del equipamiento completo que van desde 1.200, 1.600 dólares a 2.300 dólares el kW instalado”, asegura el directivo de ARYES Energías y explica que es una forma de capitalizarse o de aprovechar los ahorros si “se piensa en grande” frente a las oscilaciones de la moneda.

Frente a este escenario se calcula que las inversiones puedan amortizarse entre los 7 a 10 o 12 años, dependiendo del tamaño de la instalación, que necesita de muy bajo mantenimiento y tiene una vida útil que puede superar los 30 años.

ARYES Energía recientemente ha instalado un techo completo en una Estación de Servicio de Castelli. Se trata de un sistema de 90 kW, pensado para llevarse a cabo de manera modular. Es decir que el proyecto se realizará en diferentes etapas, permitiendo a los dueños gestionar mejor el uso de su dinero, con un impacto más amigable.

NECESIDADES DE UN NUEVO MODELO

Pese a que existe un gran interés e iniciativa del sector privado, el ámbito público no responde de la misma manera.

Según explica Holmes, existe un retraso en las importaciones de equipos e insumos, lo que produce una demora en la respuesta a la demanda.

Además, aunque fue un importante avance el que hizo la provincia de Buenos Aires adhiriéndose a la ley de generación distribuida, las distribuidoras no adaptan sus sistemas e infraestructuras para facilitar e impulsar este nuevo modelo.

“Las distribuidoras están revaluando esas situaciones para poder aceptar a los usuarios generadores. Pero también hablamos de una discusión que en grandes medidas de acá a unos 3, 4 meses debe estar zanjada, ya que es una pata muy importante para poder acceder a los beneficios”, señala el ejecutivo.