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Las ventas de ropa de trabajo se mantiene y no hay cambios en los diseños por parte de las petroleras. La entrega inmediata y el stock permanente siguen siendo aspectos centrales del servicio.
La organización eficiente de la entrega de uniformes en Estaciones de Servicio es un proceso que requiere anticipación, coordinación y tecnología. No se trata solo de vestir al personal, sino de garantizar condiciones de operatividad, imagen institucional y cumplimiento normativo en un rubro que está en plena profesionalización.
En diálogo con surtidores.com.ar, Pablo Mateus, titular de Soutex, explicó que el panorama de ventas continúa dentro de los niveles históricos, sin alteraciones en los modelos que utilizan las principales petroleras del país y agregó que “por ahora las cuatro petroleras que nosotros atendemos (YPF, PUMA, GULF y DAPSA) siguen con los mismos uniformes que vienen usando”.
Además, remarcó que, aunque el frío se retrasó este año, las entregas correspondientes a los pedidos de invierno ya se encuentran estabilizadas.

Una de las recomendaciones más relevantes para garantizar una operación sin interrupciones en las Estaciones de Servicio es planificar con anticipación los pedidos de uniformes, considerando las particularidades climáticas de cada región.
En este sentido, el mantenimiento de un stock permanente, tanto de verano como de invierno, es una práctica que marca diferencia en la respuesta al cliente. “Nosotros siempre tenemos disponibilidad”, indicó Mateus.
Además, existen otras prácticas que pueden optimizar la gestión de uniformes en las Estaciones de Servicio. Una de ellas es establecer un calendario anual de revisión de talles, que permita ajustar los pedidos ante posibles cambios de personal, rotaciones o nuevas incorporaciones, evitando así sobrantes o faltantes.
También se recomienda incluir kits completos en cada entrega. Proveer a cada operario con un conjunto estandarizado que incluya remera, pantalón, campera y calzado facilita tanto el control interno como la uniformidad en la imagen institucional.
Por último, capacitar al personal encargado de las compras es clave. Brindar formación sobre el uso de plataformas digitales, las especificaciones técnicas de las prendas y los criterios de reposición mejora la eficiencia del proceso y minimiza errores en la gestión operativa.
Organizar correctamente la entrega de uniformes implica prever, coordinar y optimizar recursos. Con procesos tecnológicos, proveedores confiables y planificación adecuada, este aspecto se convierte en un diferencial competitivo para el operador.
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