A partir de la mañana de hoy y durante todo el día, los funcionarios del Servicio de Conciliación Laboral Obligatoria, dependiente del Ministerio de Trabajo, implementaron la citación en tiempos de cuarentena de los paritarios del rubro estacionero.

Los coordinadores del Gobierno Nacional, los presidentes de las entidades empresarias y los delegados sindicales del gremio que conduce Carlos Acuña, estarán sentados en el frente de sus computadoras – vía zoom – con el objetivo, estos últimos, de lograr una actualización de los salarios de sus afiliados.

No existe una certeza de que estas primeras reuniones virtuales sean definitorias, pero todos los protagonistas coinciden en que será un primer paso a un áspero debate entre la realidad que atraviesan los expendedores a raíz de la pandemia y la necesidad de los trabajadores.

La agenda está lista para que a las 10 de la mañana comience el diálogo entre el sindicato y FECRA, luego a las 11, será el turno de CECHA, más tarde a las 12 horas, será AES quien presentará a sus representantes, a la una de la tarde, le tocará a la Cámara de Expendedores de GNC y por último a las 14, debatirán, los representantes de la Federación de Entidades de Combustibles.

Las posturas son encontradas. Los estacioneros pondrán sobre la mesa de negociaciones el crudo presente del sector, con ventas en picada desde que se decretó el ASPO, de hasta el 90 por ciento en relación al mismo mes del año anterior. Prueba de ello es que la gran mayoría de los expendedores se acogieron al Programa de Asistencia al Trabajo (ATP) para afrontar los salarios de sus colaboradores.

Por el lado de los operarios, reclamarán incorporar una nueva suma fija que se adicionaría a lo ya otorgado por orden presidencial a principios de año, en concepto de futuros incrementos.

Otra posibilidad, es de un aumento remunerativo en cuotas, para que la progresividad de la escala se vaya actualizando hasta encadenarse con el medio aguinaldo que se cobra en diciembre.

Vale recordar que en las últimas paritarias de la actividad, el aumento salarial fue del 55 por ciento, siendo el SOESGyPE uno de los únicos cinco gremios que superó el índice inflacionario. Luego, con la suma del bono solidario de $4.000, la cifra alcanzó el 70 por ciento.