La Cámara de Estaciones de Servicio de Salta, informó a surtidores.com.ar, que realizó recientemente un sondeo entre los asociados de la ciudad capital, que arrojó como resultado el hecho de que solamente dos expendedoras  habían tomado el Programa de Asistencia para la producción y el Trabajo en el mes de agosto, mientras que habían sido 30 los establecimientos que habían accedido a los ATP en el período abril.

“El ATP no es una ayuda para los empresarios pymes, sino que constituye una colaboración para los empleados, porque quien decida tomar estos subsidios, queda expuesto al riesgo de que en unos cuatro o cinco años, la AFIP le reclame deudas impositivas impagables“, lamentó el Presidente de la CESECA, Manuel Pérez.

La conclusión tiene su origen según el directivo en que “el gobierno nacional instauró como condición para recibir el dinero del Estado para pagar la mitad de los sueldos del personal, que no se pueda retirar utilidades“.

“Bajo esta condición, las empresas unipersonales, como suelen ser la mayoría de las Estaciones de Servicio, se ven impedidas de utilizar las `insignificantes ganancias´ que deja la pandemia”, señala, quien también es contador.

Pérez aseguró que las firmas familiares como las del sector expendedor, usan los dividendos para vivir y gastar en temas corrientes, con lo cual, resulta un error comparar las ganancias de las grandes compañías con las de los locales de venta de combustibles.

“La interpretación que el ente recaudador fiscal tiene de lo que significan las utilidades, es muy amplio y por ello, estamos en riesgo de ingresar al ATP y luego de cinco años, recibir una intimación de la AFIP sobre gastos que no sabíamos que podíamos tener“, advirtió.

Por otra parte, Pérez, se mostró contrario a efectivizar un aumento de salarios como pide el sindicato, a la vez que informó que los haberes de los empleados de las Estaciones de Servicio vinieron acompañando la inflación hasta este mes inclusive.

“Es doloroso para nosotros que conocemos a nuestros empleados como parte de una familia, saber que si seguimos por debajo del punto de equilibrio y no podemos despedirlos por un decreto presidencial, llegaremos a un punto donde deberemos cerrar los comercios“, lamentó.

Más allá de lo que reclame el SOESGyPE, el empresario se manifestó favorable a considerar la apertura de paritarias, pero expresó que no es el momento oportuno para hacerlo. “Tenemos dos puntos centrales que debemos cuidar, en primer lugar, la fuente de empleo de nuestra gente y en segundo término, el poder adquisitivo de los salarios“, finalizó.