Incertidumbres, presiones, márgenes de rentabilidad reducidos y desabastecimiento son los obstáculos que tienen los empresarios de las Estaciones de Servicio argentinas para enfrentar en un nuevo año.

En este sentido, en entrevista con surtidores.com.ar, el exsubsecretario de Recursos Hidrocarburíferos de la Nación, Marcos Pourteau, comparte su análisis sobre la situación actual y cómo hacerle frente a los desafíos para encontrar mayores beneficios.

¿Cómo ve el mercado de los combustibles con esta política de precios?

El mercado de combustibles no escapa a los problemas económicos que enfrenta la Argentina hoy, por el contrario es objeto de controles de precios de manera informal por parte del Gobierno en forma permanente, y también restricciones a las importaciones de combustibles que son necesarias para cerrar la brecha entre la oferta y demanda en Argentina.

Es muy difícil ver el panorama mejorando en el corto plazo, al menos hasta que cambien las políticas macroeconómicas por un lado, y se deje de lado el control de precios por el otro.

¿Por qué cree que no hay más marcas en el mercado argentino?

Un mercado altamente intervenido no es necesariamente un mercado donde nuevas marcas tengan interés en desarrollarse. Crear y desarrollar una marca requiere enormes inversiones, y difícilmente el nivel de riesgo actual del mercado argentino se vea atractivo para realizarlas.

En segundo lugar, el downstream a nivel global enfrenta grandes desafíos, por lo cual no es extraordinario ver 4 o 5 marcas a lo que se suma un ecosistema de estaciones blancas o independientes.

¿Qué piensa de la situación por la que están atravesando las Estaciones de Servicio?

Es un sector muy diverso, la Argentina es un país extenso y hay una gran diferencia entre las situaciones que enfrentan estaciones en las grandes zonas urbanas y las de pequeños pueblos del interior del país.

Aun saliendo de las grandes urbes no es lo mismo lo que ocurre en el interior de la provincia de Chubut o Santa Cruz, con la del interior de la provincia de Córdoba o Santa Fe.

Obviamente la intervención en el sector crea distorsiones que hacen muy difícil llevar a adelante el negocio de manera previsible. El camino pasa por normalizar la macroeconomía y levantar las restricciones. Luego viene como dijimos la diversidad de los desafíos de una red de estaciones como la de Argentina.

¿Qué considera pertinente llevar adelante para que no falten combustibles en épocas de alta demanda?

Los episodios de escasez en Argentina en el pasado estuvieron en general atados a la intervención de precios del Gobierno que significaba que las importaciones de combustibles fueran a pérdida para las empresas.

La solución a la seguridad de abastecimiento está en permitir a los operadores un negocio libre;  que no quiere decir “no controlar las conductas potencialmente anticompetitivas”, sino no generar situaciones donde la cadena opere a pérdida en el corto plazo y tenga incentivos para reducir la oferta.