Luego de un hecho escandaloso que dejó al descubierto la falta de regulaciones y contención normativa que vive hoy en día la industria del GNC, los representantes de los talleres oficiales certificados, lamentaron que “lo ilegal siga siendo legal”, al referirse a la responsabilidad directa del ENARGAS en los controles y auditorías del mercado.

Este caso que saliera recientemente a la luz, parece no ser el único, en un momento de crisis, donde la escasez de poder adquisitivo y la necesidad del consumidor se convierten en caldo de cultivo para los oportunistas.

“La estafa a la que se refiere el matrimonio afectado, tiene varias aristas, pero todas se relacionan con el seguimiento de la trazabilidad del cilindro que fuera vendido, al parecer como nuevo y supuestamente fuera fabricado en 1999”, detalló a surtidores.com.ar, el Presidente de la CAPEC, Horacio Magrath.

Vale destacar que según las denuncias, la firma Rental GNC presentó el producto como de fabricación italiana, pero finalmente no lo era en ninguno de sus componentes, además de haber faltado a la verdad afirmando que era nuevo.

“Lógicamente que por el precio en que se ofrecía el equipo, resultaba imposible que sea a estrenar y por otra parte, los repuestos de adaptación al motor no serían los correctos, a la vez que el personal encargado no habría demostrado idoneidad para el trabajo”, alegó el representante de la Cámara.

Pero desde la entidad, van más allá del hecho en particular, porque lamentan que se descartaran medidas que el Ente regulador había comenzado a implementar para el seguimiento de todos los equipos que circulen en el circuito.

“Un día, la normativa que estaba publicada en la página oficial del ENARGAS, dejó de estarlo”, dijo Magrath al referirse a una resolución por la cual, quedaban inutilizados para cualquier tipo de operación los cilindros que no pudiesen comprobar ser parte de un lote oficial, sea del año que fuese la fabricación.

“Seguramente la parte legal protege a los delincuentes”, recalcó y comentó que “a pesar de que se comprometieron a cambiar las cosas, siguen dejando sin poner en claro algunos puntos que le corresponden al Estado”.

De acuerdo al análisis de Magrath, en el hipotético caso de que el cilindro en cuestión perteneciera a un bloque ingresado en su momento al registro del ente, el responsable por no haber controlado el estado del equipo y su recorrido es pura y exclusivamente de las autoridades. El ENARGAS tiene todos los datos del taller, el PEC y la marca bien definida, con lo cual, a su entender, “debería ser quien actúe al respecto”, opinó.

Vale recordar que en febrero pasado, la entidad había recibido un compromiso de parte del ENARGAS para entre otras cosas, definir una nueva reglamentación para el uso seguro y eficiente del GNC como combustible de vehículos, incluyendo que todos los desmontajes deberán realizarse con la documentación que exige la normativa y en un taller homologado.

Además se había insistido en que una vez que se concretan, los desmontajes, estos deben ser informados fehacientemente en un plazo máximo de 15 días y se habló de la posibilidad de acceso a un Sistema Informatizado Centralizado del GNC de los fabricantes para poder evaluar y dar conformidad a la trazabilidad del equipamiento y la baja automática del sistema de los cilindros en uso o instalados que no cuenten con la oblea vigente.