¿Cual es la estrategia más elegida para detectar infracciones en las estaciones de servicio?

Las estaciones de servicio son comercios que al estar 24 horas en pleno funcionamiento operativo se hacen difíciles de controlar. Hay horarios que favorecen una atención más relajada y en ocasiones poco dispuesta hacia el cliente, generalmente durante la noche, que es cuando no se encuentran presentes los responsables del establecimiento para supervisarlo.

Es por este motivo que surgió el automovilista encubierto, una figura elegida especialmente por las compañías petroleras para poder efectuar un check-list del comportamiento del personal como de las condiciones de la boca de expendio. El relevamiento conlleva una serie de requisitos que permiten advertir a simple vista si se cumplen los parámetros de servicio, calidad y seguridad, que distinguen la marca que las embandera.

Este mecanismo no solo se circunscribe al análisis privado sino que también el Estado comenzó a hacer uso del modelo. Con agentes de incógnito, que simulan ser clientes comunes, la AFIP inició una ofensiva en las estaciones de servicio para constatar cuando no se entregan facturas o no se aceptan tarjetas de crédito o de débito como medios de pago.

¿De que modo? Llegan al comercio, compran como si fueran clientes comunes y corrientes, y no reclaman el comprobante sino que esperan que el vendedor se los entregue. Si la factura no aparece, se identifican inmediatamente como agentes de la AFIP y labran las actas de infracción.

Durante estos procedimientos también se aplican clausuras preventivas, que se hacen en el acto y sin realizar todo el circuito administrativo normal. Esa decisión se toma cuando se estima que los montos evadidos son elevados. En esos casos, los agentes convocan a la fuerza pública para que se apliquen las fajas. Es lo que estuvo ocurriendo precisamente la localidad cordobesa de Río Cuarto y su zona de influencia, según destacaron medios locales.

Asimismo los operativos se centran en la aceptación de un instrumento de pago adicional al efectivo. Está establecido por ley que los consumidores deben tener la opción de pagar con medios bancarizados, como la tarjeta de débito, o con las tarjetas de crédito.

“El objetivo de estas acciones se centra en la necesidad de hacer cumplir a los contribuyentes la obligación de recibir distintos medios de pago. La idea es reducir al mínimo el uso de circulante monetario, disminuyendo de esa manera las operaciones sin respaldo documental. Se destaca que esta rutina de control se está realizando en todos los estratos de la actividad económica en los que se vislumbra esta maniobra”, señaló la dependencia al respecto.