La nacionalización de YPF marcó un antes y un después en la situación de las estaciones de servicio. Todo cambió a partir de este hecho trascendental: se terminó la escasez, se abrió un  canal de diálogo inexistente hasta entonces y se comenzaron a debatir temas que abarcan el conjunto de la problemática que afecta a los expendedores.

De a poco se fue modificando incluso la estructura que regulaba el mercado de los combustibles. Mientras que cuando Repsol estaba al frente de la petrolera se intentaban contener los precios para evitar su impacto en el índice inflacionario, el presente propone un escenario de alineación a los valores internacionales para solventar la recuperación  del autoabastecimiento energético.

En este contexto las estaciones de servicio juegan un papel fundamental. Hoy las aspiraciones de YPF dependen en gran medida del flujo proveniente de sus surtidores, de ahí su firme decisión de incrementar el market share actualmente en índices cercanos al 60 por ciento, sustentado además por la cobertura nacional que ofrece su red de más de 1500 bocas.

Sin bien los objetivos de YPF son una causa común, para el resto de las compañías las condiciones del mercado también resultan muy favorables. Y en ese aspecto es que al igual que la estatal pero con intereses diferentes, buscan apropiarse de la mayor cantidad de clientes posible.

Todas las empresas están enroladas tras este objetivo: en pocos días AXION Energy estrenará un nuevo concepto en estaciones de servicio, Oil Combustibles pone énfasis en sus confortables tiendas de conveniencia, Shell propone calidad en sus productos y Petrobras decidió renovar su apuesta al país.

YPF en tanto, se perfila hacia la profesionalización de la actividad para brindar un servicio de excelencia. La gestión de Miguel Galuccio está enfocada en ofrecer más y mejores herramientas a sus operadores a través del desarrollo de los recursos humanos y la capacitación permanente mediante su Programa de Calidad +YPF, que en 2013 evaluó más de 1.350 estaciones de la Red Abanderada de las cuales 60 resultaron ganadoras y fueron premiadas por alcanzar el estándar requerido para estar dentro de las mejores.

La propuesta está servida. Al respecto, un empresario, titular de varios negocios de esta bandera, señaló que “estamos dispuestos a enfrentar el desafío”. Al tiempo que le dio la bienvenida a este tipo de iniciativas,  expresó que “colaboran a perfeccionar el desenvolvimiento de nuestra actividad”.