El Complejo Industrial La Plata (CILP) de YPF es uno de los más importantes de América del Sur y uno de los activos industriales más dinámicos de la República Argentina. Se encuentra en Ensenada, Provincia de Buenos Aires, a escasos kilómetros de la ciudad de La Plata.

La refinería posee la capacidad de procesar todas las variedades de crudo que se producen en el país para obtener una amplia gama de productos. Tiene una capacidad de 189.000 barriles por día, 118.800 barriles diarios de conversión y un índice de Complejidad Solomon de 8,2.

Sin embargo, las necesidades crecientes del parque automotor demandan su actualización permanente en pos de brindar más y mejores combustibles. Es así que tras la inauguración de la planta de Hidrodesulfuración de Gasoil (HTG B) en 2012, que produce 1.825 millones de litros anuales de este producto de alta calidad, la petrolera se embarcó en millonarias inversiones para seguir satisfaciendo los requerimientos del mercado.

Recientemente adaptó  las instalaciones para el procesamiento del azufre adicional producto de las unidades desulfuradoras a instalar para cumplir con especificaciones de azufre en combustibles (Res. 1283/06 y 478/09 de la Secretaría de Energía) y con las tendencias crecientes de contenido de azufre en las canastas de crudo proyectadas.

Asimismo se incrementó la confiabilidad y flexibilidad operativa del Complejo, mediante la instalación de una unidad back up para la Planta Claus actual.

Mientras tanto se mantienen en curso los trabajos para instalar una nueva unidad de hidrotratamiento de naftas de coque (3.240 m3/día) que complemente la capacidad de la unidad existente para los futuros requerimientos. Según informaron desde la compañía, será integrada al circuito de procesamiento de naftas de la Refinería. Su principal objetivo será el acondicionamiento de la carga a la unidad de Platforming existente para alcanzar la especificación de calidad requerida.

También está en marcha la nueva Unidad de Coque A con vistas a aumentar la capacidad de procesamiento y asegurar la continuidad en la conversión de fondos en las unidades de coque del CILP; optimizando la calidad y aumentando el rendimiento de destilados al incrementar la severidad en la operación. Para ello se destinaron nuevos hornos con mayor eficiencia energética, disminuyendo el impacto ambiental instalando quemadores de bajo óxido de nitrógeno.