Ya son seis las provincias que no despacharán combustibles durante las fiestas de fin de año

Ayer la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA) y la Federación de Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio, Garages, Playas, Lavaderos Automáticos y Gomerías de la República Argentina (FOESGRA) resolvieron suspender la atención al público desde las 22:00 horas hasta las 6:00 los días 24 y 31 de diciembre.

El convenio aclara que se conservará “una guardia mínima para la vigilancia y despacho de combustibles en caso de urgencia que lo requieran los servicio públicos, como policía, bomberos y ambulancias. Asimismo, se realizará la difusión de tal medida para que los usuarios tomen debido conocimiento y realicen las previsiones que correspondan”.

Fue un reclamo que planteó el gremio para garantizar que sus afiliados puedan cenar con sus seres queridos, tal como lo hicieron en 2013, cuando se probó por primera vez y arrojó buenos resultados.

Este acuerdo representa a las bocas de expendio de Salta, Corrientes, Entre Ríos y La Pampa. Se suma a la Provincia de Buenos Aires, que por convenio dejó establecido este beneficio para personal durante la paritaria de principios de año. La Cámara de Expendedores de GNC (CEGNC) también accedió al pedido de los trabajadores.

En Cuyo están conversando este y otros puntos que interesan al sindicato. La misma discusión se está dando en otras regiones, coherente con la línea que FOESGRA marcó a nivel nacional. Todo indica que en el grueso de los distritos los expendedores de naftas y gasoil van a adherir a las necesidades sindicales.

¿Cuál sería el motivo que podría impedir el acuerdo? Hay estacioneros que no quieren bajar las persianas dos días que consideran de gran nivel de ventas. Aseguran que no están en condiciones financieras de sacrificar ingresos. Sin embargo, son la minoría, dado que otro grupo plantea que se entrega el mismo stock los días previos y sucesivos.

Incluso por una cuestión de seguridad también acompañan la medida, ya que en estas dos jornadas suelen producirse inconvenientes con el personal. Las motos llegan al surtidor sin casco, y al igual que los automovilistas, con alto nivel de alcohol en sangre, lo que genera situaciones de violencia.