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En noviembre, última fecha informada por la Secretaría de Energía, la demanda de naftas y gasoil al público sufrió un importante retroceso respecto al mismo mes del año anterior. La situación puso en alerta a los empresarios y trabajadores quienes se preparan para enfrentar un 2015 que avizoran complicado.
El consumo de naftas y gasoil en las estaciones de servicio sigue sin dar señales de recuperación. Así se desprende del último informe de la Secretaría de Energía, el cual señala que las ventas de estos combustibles retrocedieron en noviembre 5 por ciento respecto al mismo mes del año anterior.
De acuerdo al relevamiento, solo el diesel Premium se salvó del derrumbe, ya que su demanda trepó 10 por ciento. El resto de los derivados, en especial el gasoil tradicional (-7.6), un producto afectado a la actividad agrícola e industrial, obtuvieron un desempeño interanual negativo.
Las naftas también sufrieron las consecuencias del escenario recesivo que padecen las bocas de expendio. La súper, que venía siendo la excepción del repliegue del mercado, esta vez se ubicó en el contexto general: cayó 5.2 por ciento, en tanto que la Ultra hizo lo propio con un 4.3 por ciento.
El volumen total comercializado al público durante este período alcanzó los 1313 millones de litros, 66 millones menos que un año atrás. No obstante noviembre mantuvo los índices de consumo de los meses que lo precedieron, reflejando que los despachos transitan una meseta similar al de la mayoría de las actividades económicas.
En cuanto a las empresas, YPF sigue posicionada cómodamente en el primer lugar de ventas cautivando al 58 por ciento de los automovilistas que se acercan a los surtidores. El segundo lugar fue para Shell con el 16.6 por ciento del share, Axion energy (Esso) se quedó con el 12.7, en tanto que Petrobras y Oil Combustibles sumaron en conjunto 10.2 por ciento.
Panorama complicado
Oscar Díaz, presidente de la Confederación del Comercio de los Hidrocarburos de la República Argentina (CECHA), vaticina que “la disminución de las ventas y la baja del precio del petróleo, hacen pensar en un año complicado”.
“El panorama es que esta tendencia bajista siga; en el mejor de los casos se va a mantener el precio del crudo y en el surtidor, lo cual en términos reales implica una reducción de los márgenes, por efecto de la inflación”, sostuvo Díaz en contacto con surtidores.com.ar.
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