Se acerca julio y en cuatro provincias están truncadas las negociaciones salariales

Cuatro distritos que forman parte de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA) y se rigen bajo el convenio colectivo de trabajo 371 están ingresando a la segunda mitad del año sin haber resuelto la discusión paritaria.

¿Cuáles son los motivos? Desde el comienzo de año hubo diferencias entre los dirigentes. Los expendedores de combustibles se plantaron en el 24 por ciento de aumento, al tiempo que otras cámaras cerraban cerca del 30 por ciento. El tema se fue dilatando, al punto que según informan fuentes del sector a surtidores.com.ar “las conversaciones están truncadas”.

Hubo un intento por cerrar en pack – las cuatro provincias juntas – y así dar por terminado el tema, en una reunión prevista para el miércoles pasado, pero sin dar demasiadas explicaciones, el sindicato que conduce a nivel nacional (SOESGYPE) Carlos Acuña, prefirió postergar la cita. “Fracasó la audiencia”, confirmaron en CECHA a este medio.

En este contexto, la Confederación presentó una nota formal a la cartera laboral solicitando que convoque a las partes a continuar con el debate. “Lo que me resulta raro es que otros años el gremio nos apuraban para que firmemos los mismos valores que otras cámaras y ahora que ya cerraron esquivan la situación”, manifestó la fuente.

Las relaciones habían mejorado en 2014, durante el armado de la Multisectorial, que tenía entre sus objetivos elaborar un proyecto de ley que estableciera como prioridad la defensa de las pequeñas y medianas empresa – e indirectamente los puestos de trabajo – frente al avance de las compañías petroleras. Hasta ese momento, la situación era cordial y de diálogo.

Ya a principios de 2015, cuando se empezaron a delinear las estrategias de la paritaria, los buenos modales fueron quedando de lado. Hoy prácticamente no hay contacto y por eso será el Ministerio el que defina el porcentaje definitivo. En el gremio confían que será en línea con los acuerdos ya concretados.

Mientras tanto, el personal sufre la pérdida del poder adquisitivo. Si bien las bocas de expendio, en general, abonan ajustes de sueldo a cuenta de la escala futura, hay incertidumbre e inestabilidad por lo que pueda llegar a ocurrir. En ninguna provincia se firmó por encima del 30 por ciento, aunque Córdoba estuvo cerca, con el 29.8.