Quieren impulsar medidas integrales para desincentivar el uso del efectivo en las Estaciones de Servicio

Los dueños de Estaciones de Servicio afirman que la demora en la modificación de la ley de regulación de plazos y comisiones en las ventas con tarjetas de crédito incide de manera directamente proporcional con la crisis delictiva que afecta al sector.

En este contexto, tras un nuevo incidente en la ciudad de Rosario, donde trabajadores y clientes lograron detener a un ladrón armado que intentaba asaltarlos para hacerse con la recaudación, desde la Federación Argentina de Expendedores de Naftas del Interior (FAENI) expresaron su profunda preocupación.

En dicho caso, el presidente de la entidad, Alberto Boz, anunció que se llevarán a cabo reuniones con los intendentes de los municipios más afectados por los delitos y con los comisarios de la zona, con el objetivo de incrementar la presencia policial y el control de las fuerzas de seguridad locales.

“Nuestro reclamo de modificación de las condiciones en las transacciones con tarjetas de crédito contribuiría rápidamente a reducir el uso de dinero en efectivo en las Estaciones de Servicio“, afirmó Boz.

Es importante destacar que los estudios de campo realizados recientemente por el sector estacionero, en colaboración con las fuerzas policiales, han demostrado que los puntos de venta de combustibles son un objetivo “tentador” para los delincuentes, quienes ven en ellos una oportunidad para acceder a grandes sumas de dinero de manera fácil y rápida.

“Si no logramos reducir el uso de dinero en efectivo mediante medidas concretas, el flagelo y la violencia contra nuestros negocios seguirán en aumento“, advirtió el dirigente santafesino. Asimismo, resaltó que un cambio favorable en relación al uso de tarjetas de crédito constituiría un paso importante en este objetivo.

Finalmente, Boz explicó que una nueva legislación sobre tarjetas complementaría la estrategia territorial del programa de puntos de patrullaje en las Estaciones de Servicio de las zonas más conflictivas de Rosario, la cual ha estado funcionando de manera aceptable desde su implementación en 2021.