¿Qué cambió en el negocio de los combustibles para que las petroleras inviertan?

El parque refinador de Argentina permanecía estancado desde la década del 80. Sin embargo, luego de la expropiación de las acciones de Repsol en YPF el Gobierno anuncio ampliaciones en sus tres destilerías – Lujan de Cuyo, Mendoza; La Plata, Buenos Aires y Plaza Huincul, Neuquén – lo que le permitirá incrementar la producción en los próximos años.

Una apuesta importante está realizando AXION energy – ex Esso – en su planta de Campana, destinando 1.200 millones de dólares. En la misma dirección avanzarían el resto de las petroleras; según confirmaron fuentes del mercado a surtidores.com.ar, Oil Combustibles encargó estudios para evaluar la posibilidad de realizar mejoras en su refinería de San Lorenzo con el objetivo de crecer en el negocio de las naftas. Necesita adquirir nuevos equipos para elaborar derivados a partir de crudos pesados.

Gerardo Rabinovich, directivo del Instituto Argentino de la Energía (IAE) “General Mosconi” explica que “los aumentos de los precios de las naftas y gasoil al público son una señal que permite a las empresas avanzar en la evaluación de los proyectos de ampliación”. En su opinión “la mayoría de las banderas está posicionándose para después de 2015, cuando cambie el Gobierno y se aplique otra política energética”. Entiende que en ese entonces se ofrecerían mayores beneficios a los capitales, tanto nacionales como extranjeros.

Desde una importante compañía local agregaron otros motivos que impulsan este cambio de actitud en la actividad: “el mercado de las naftas crece al ocho por ciento anual, el de gasoil a un ritmo más bajo pero también evoluciona en alza, mientras que el parque refinador opera al límite de la capacidad; además se está importando en cantidades crecientes y este contexto ofrece una oportunidad de negocios para alguien con vocación de invertir”.

En el fondo, las destilerías se entusiasman con sustituir las compras de combustibles provenientes del exterior a partir de aumentos de la producción. De hecho, en los próximos tiempos habrá más volumen de crudo disponible, lo que a la vez es de suponer que abarataría el costo del barril en la plaza interna, el principal insumo, cuando se avance definitivamente sobre los recursos no convencionales de Vaca Muerta.