Tal cual surge del estudio de las cifras que muestra el presupuesto elaborado por el Poder Ejecutivo que espera su aprobación en el Congreso, el aumento sostenido de los impuestos específicos a los combustibles en 2025, que supera el 137 por ciento en términos reales, genera preocupación en el sector de las Estaciones de Servicio, ya que impactará directamente en los precios que los consumidores verán en las pizarras.

La propuesta presidencial establece las bases para la discusión legislativa del presupuesto, priorizando el equilibrio fiscal bajo cualquier circunstancia macroeconómica. En ese sentido, el economista Cristian Bergmann, consideró que, el gobierno de Milei ha adoptado “una metodología de blindaje fiscal, independientemente de lo que ocurra en el escenario económico“.

Así las cosas, el entrevistado aseguró que esto significa que el sector público nacional deberá alcanzar la ecuanimidad en sus cuentas sin excepciones, y una de las herramientas para lograrlo será un incremento en los impuestos, en este caso, a los combustibles.

De acuerdo con el consultor económico, los tributos específicos proyectados para 2025 experimentarán una suba significativa del 155,4 por ciento, muy por encima de la inflación estimada en 18,3 por ciento.

Tal cual sus dichos, la recaudación por impuestos a los combustibles y al dióxido de carbono crecerá en un 137 por ciento en términos reales, con un estimado de $5.539.780,6 millones para el 2025, lo que representará un incremento nominal del 155,2 por ciento respecto del año anterior.

“Este salto en la carga impositiva tendrá como consecuencia un aumento del porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) correspondiente a estos tributos, que pasará del 0,38 por ciento al 0,73 por ciento”, explicó Bergmann a surtidores.com.ar.

Al respecto, expresó que las actualizaciones de los impuestos pendientes, que se aplicarán de manera gradual a lo largo de 2025, serán uno de los factores determinantes de este aumento. “Aunque en el actual ejercicio 2024 el Gobierno ha intentado moderar su impacto en los precios de los combustibles buscando limitar el efecto inflacionario, no se puede descartar que el año próximo esta tendencia se revierta”, adelantó el consultor.

“Es esperable que el Gobierno deba ajustar las previsiones establecidas en el presupuesto, dado que en este año ha moderado el traslado de impuestos al surtidor para evitar mayores presiones inflacionarias”, señaló Bergmann. Sin embargo, ante la necesidad de incrementar los ingresos fiscales, analizó que el margen para continuar con esta estrategia es cada vez más estrecho.