“Esta nueva realidad obligó a tener que adaptarse. Muchas de las Tiendas de Conveniencia se han reconvertido, ampliando sus servicios”, explica a surtidores.com.ar, Analía Salguero, presidenta de la Cámara de Estaciones de Servicio de San Juan (CECA).

La dirigente afirma que tras las fuertes caídas en las ventas de combustibles (del 90 por ciento en algunos casos) que desató la pandemia, los minimercados han sido una herramienta de contención.

“Muchos estacioneros apuntaron a ampliar el rubro almacén, que antes no era tan importante; o a desarrollar más el concepto de cafetería, mejorando la panadería y vendiendo productos elaborados”, observa.

No obstante, Salguero aclara que no es que se haya vendido más volumen respecto a momentos pre pandémicos, sino que la sofisticación “ha sido más una forma de sobrevivencia que de crecimiento, pero que ha permitido mantener las estructuras, que son costosas”, señala.

¿Existe la posibilidad de que el modelo de negocio de las Estaciones de Servicio argentinas se empiecen a parecer a las de Europa, donde un 70 por ciento de las ventas son explicadas por los minimercados y sólo el 30 por ciento restante por el expendio de combustibles? Para la titular de CECA, en el corto o mediano plazo, todavía no.

“Argentina tiene una realidad distinta que la de otros países, en particular por sus leyes laborales. Los sindicatos hacen que los empleados de las tiendan entren dentro del convenio de los operarios de Estaciones de Servicio, con todos los adicionales que tiene un experto de playa. Entonces son sueldos un tanto costosos que las confiterías no soportan, ya que tienen otros movimientos que no son los de las expendedoras”, argumenta.

Explica que hoy el negocio en Argentina se compone aproximadamente por un 80 por ciento de despacho de combustibles y un 20 por ciento de ventas en tienda, pero advierte que esa no es una realidad homogénea sino más bien un promedio.

“Esa variabilidad tiene mucho que ver por dónde esté ubicada una Estación de Servicio. Hay tiendas que son muy protagónicas, y que a veces el expendio no existe al lado de lo que puede vender una tienda; pero casos que son totalmente lo contrario, que en el expendio está la esencia”, precisa.

Sin embargo, opina que es probable que las Tiendas de Conveniencia ganen cada vez mayor terreno, y que parte de ese avance sea acelerado por la pandemia. “Creo que este podría ser el futuro del negocio, dado que todos sabemos que el combustible en algún momento se va a terminar y los márgenes, cada vez más pequeños, hacen que el negocio sea cada vez menos virtuoso”, señala.

De hecho, comenta que las petroleras le prestan cada vez más atención a este segmento de negocio. “Shell, que es a la red que yo pertenezco, ha puesto énfasis a desarrollar las tiendas y poner sus fichas ahí”, confía Salguero.