En Argentina, las Estaciones de Servicio enfrentan una difícil situación debido a una serie de factores que combinados, afectan la rentabilidad y la viabilidad de los negocios, lo que genera incertidumbre para los empresarios que las operan.

En un extenso diálogo con surtidores.com.ar, Isabelino Rodríguez, secretario de CECHA y presidente de la Cámara de Expendedores de Mendoza (AMENA), analizó el actual contexto del sector.

¿Cuáles son los principales problemas que enfrenta la mayoría de Estaciones de Servicio del país?

El principal problema que afrontamos desde el sector, es la distorsión de los precios relativos de la economía, que en los combustibles tiene mucha gravitancia. Ahora, se llama “precios justos”, antes congelamiento de precios, pero al final del día, cualquiera sea el concepto que se aplique, las estaciones tenemos una menor rentabilidad, que pone en jaque nuestros negocios. Es  una tormenta perfecta: Por un lado precios estancados y por el otro paritarias y gastos de explotación como energía, insumos, etc que siguen a la inflación.  Por eso es que desde CECHA hemos declarado la emergencia del sector. Está claro, que más allá de algunos sucedáneos, tanto las petroleras como el gobierno principalmente, no han tomado medidas de fondo, que nos permitan avizorar expectativas favorables por el momento.

Estaciones de Servicio de todo el país declaran el “estado de emergencia”

¿Qué gestiones se están haciendo para resolver la situación?

Con las petroleras conversamos sobre las comisiones de venta que tienen nuestros contratos de bandera, que se encuentran convencionalmente congeladas desde hace años; y con el gobierno, a través de los funcionarios del Ministerio de Economía, para la adopción inmediata de medidas transitorias que nos permitan afrontar la crisis, y poder hacer mínimamente frente a los requerimientos salariales. En ese orden se inscriben nuestros pedidos sobre disminución de los plazos en acreditación de tarjetas de crédito; formulación de un REPRO para Estaciones de Servicio; disminución transitoria de las cargas laborales, ampliación de la categorización como MiniPYMES  de todos los establecimientos, para poder tomar a cuenta de ganancias los débitos y créditos bancarios, entre otras medidas que propulsamos desde CECHA.

¿Por qué supone que el gobierno no ha convocado a las Estaciones de Servicio a la discusión del acuerdo de precios?

Entiendo que es un error estratégico del gobierno no convocarnos a las mesas donde se deciden todos estos temas. Somos más de 5000 PyMES y 65.000 empleados vinculados a un sector que tiene mucho para aportar, por nuestra cercanía con los clientes y por el conocimiento de la problemática diaria que nos aqueja. No puede ser que las petroleras mantengan precios congelados y puedan obtener beneficios principalmente impositivos en las negociaciones, que mitigan sus pérdidas y nosotros seamos el hijo tonto que guardan en un desván. Esperamos que esta situación sea rápidamente revisada, porque de otro modo, nos van dejando cada vez menos espacio para priorizar el diálogo y nos llevan a una confrontación sectorial, que no podremos eludir en el actual contexto.

Buscan declarar la emergencia del sector de expendio de combustibles

¿Considera viable la aplicación de un adicional sobre el precio de la nafta y el gasoil como una de las soluciones para mejorar la rentabilidad?

Se ha intentado varias veces esta medida, pero nos hemos topado con dificultades legales para encararla. En realidad, deberíamos dejar de trabajar con parches, y encontrar soluciones de fondo a nuestra problemática. Éstas han sido propuestas, en los ámbitos competentes sin respuestas favorables hasta el momento. No podemos mendigar lo que nos corresponde por derecho. Necesitamos un marco preciso, a largo plazo, que nos posibilite quebrar esta inercia viciosa que transitamos.

¿Evalúa que la infraestructura de las Estaciones de Servicio argentinas es acorde a las demandas del mercado actual?

La infraestructura asociada a las Estaciones de Servicio, es por demás acorde a las demandas del mercado. De hecho, a pesar de todo, los empresarios del sector seguimos apostando por cambiar la imagen de los establecimientos, capacitando a nuestros recursos humanos, y haciendo ingentes esfuerzos por atender de la mejor forma posible a nuestros clientes. Esto está en el ADN del estacionero, pero no podemos obviar que hay desesperanza y preocupación, porque no hay respuestas de fondo a nuestras necesidades operativas básicas. Se nos exigen inversiones estructurales en nuestros negocios, que no son adecuadamente correspondidas. Entonces se va produciendo una debacle, sobre todo en las estaciones que están trabajando debajo de su nivel de flotación, que cada día son más  y ahí es donde el sistema en su conjunto se desquebraja. Debemos parar esta sangría.

Suma apoyos la aplicación de un adicional al precio de la nafta y el gasoil para sumar rentabilidad

Si las dificultades económicas retrasan la evolución del sector, ¿cómo imagina la transición energética a nuevas tecnologías? 

Argentina tiene inmensos recursos naturales, una creciente producción de crudo y especialmente de gas en Vaca Muerta, que van a ampliar en el corto plazo la matriz energética del país, hacia el GNC y el GLP, como estadio previo a la electromovilidad. Pero la urgencia, puede más que la planificación y sino generamos ámbitos de diálogo  propicios con las petroleras y el gobierno para planificar y contar con los recursos necesarios,  para que  esta realidad se materialicen en nuestra actividad, el proceso de adecuación del sector en esta transición energética, será por demás traumático. Es esencial poner en la agenda de los actores del sector esta temática en forma urgente.