Mangueras de GNC: instalación y reemplazo

El artículo 52 de la Ley 24.076 le asigna al Enargas, entre sus funciones y facultades, la de dictar reglamentos en materia de seguridad, normas y procedimientos técnicos, incluyendo también al gas natural comprimido; reglamentos a los cuales deberán ajustarse todos los sujetos de la Ley. En virtud de ello, el organismo dispuso distintas resoluciones en lo que respecta al uso de mangueras de carga, que a pesar de conocerlas por su manipulación diaria, no está de más recordar su regulación.   

Deben tenerse en cuenta las siguientes prácticas al efectuar el montaje de mangueras en surtidores nuevos o al reemplazar mangueras en surtidores existentes.

Inspección preinstalación: antes de montar una manguera, prever:

El largo y el desplazamiento

Posicionamiento correcto para evitar torsiones, quiebres y retorcidos

La altura correcta para evitar rozamientos contra superficies abrasivas

Manipuleo durante la instalación: manipularla con cuidado durante la instalación. El mal trato o el curvado excesivo a menos del radio mínimo de curvatura puede reducir el período de utilización.

Evitar el doblado excesivo en la unión del terminal y la manguera. 

Angulo de giro y orientación: la presión aplicada a una manguera retorcida puede acortar el período de utilización de la manguera o desprender los terminales. Para evitar el retorcido es útil guiarse por una línea de referencia marcada.

Seguros y protección: instalar las restricciones necesarias y los dispositivos de restricción. Determinar que tales dispositivos no provoquen tensiones adicionales o puntos de deterioro.

Torque de ensamblada: el extremo de un terminal de manguera normalmente es roscado. Para obtener un sellado adecuado cuando es conectado, en forma directa o a un adaptador u  otro terminal, deben respetarse los diferentes valores de torque que se especifiquen. Deberá emplearse una adecuada herramienta para el ajuste correcto de cada conexión de modo de evitar la deformación del hexágono del terminal.

Precauciones durante la inspección

Para evitar lesiones, en caso de verificar pérdidas:

Cerrar inmediatamente la válvula del surtidor para despresurizar la manguera

Proceder al recambio automático de la manguera

Inspección de mantenimiento y controles: El cumplimiento de un plan de inspecciones de mangueras y terminales mantiene alta la operatividad segura del sistema, y reduce el riesgo de lesiones personales y de daño a la propiedad. En usuarios de la manguera deberá diseñar e implementar un programa de mantenimiento preventivo.

Frecuencia de la inspección: la inspección será continua por parte del operador, y por parte del representante técnico del establecimiento, con la frecuencia que este estime de acuerdo con el historial y las características de uso de cada manguera, pero como mínimo una vez por año.

Controles:

Inspección visual (manguera y terminal)

Cargas axiales excesivas

Cargas transversales excesivas

Flexión excesiva: debe verificarse la existencia de sistemas protectores.

Torsión excesiva: debe verificarse la forma de instalación para evitar que un montaje incorrecto lleve a generar torsión indebida.

Aplastamiento: producido comunmente por cierre imprevisto de capot pisado por cualquier vehículo.

Quiebres

Abrasión: debe verificarse en la cubierta exterior la no existencia de rozamientos contra el piso o superficies filosas, excoriaciones, cortes o desprendimientos

Retorcido: debe verificarse la forma de instalación de la manguera cuidando que un montaje incorrecto no lleve a generar el retorcido en su utilización.

Temperatura excesiva: producida por el contacto con superficies calientes. Debe verificarse que las mangueras no se presenten duras, tiesas, ablandadas, ampolladas, quebradizas ni carbonizadas.

Pérdidas en las mangueras o terminales

Terminales Dañados, quebrados, corroídos o deslizados de la manguera.

Deterioro químico.

Otros signos de significativo deterioro.

Si se presentara cualquiera de estas condiciones

Evaluar si el montaje de la manguera ha sido la causa u en este caso efectuar la corrección pertinente.

De corresponder, proceder a su inmediato reemplazo.